El 1 de octubre, la República Popular China celebrará el 66° aniversario de su fundación. La paz y el desarrollo han sido los principales temas del último año, y continuarán siéndolo.
Este fue un año vital para China. En sus asuntos internos y externos,
China logró resultado significativos, y estableció sólidas bases para el
futuro.
El desarrollo es la prioridad para China en la actualidad. Su desarrollo es la mayor contribución al mundo.
Durante la sesión legislativa anual de China en marzo, los líderes
establecieron el objetivo de crecimiento del producto interno bruto
(PIB) del país para este año en alrededor de siete por ciento, el índice
más bajo en 11 años. Sin embargo, se concentrará en la calidad en lugar
de en la cantidad. El presidente chino, Xi Jinping, capturó el nuevo
enfoque al acuñar la frase "nueva normalidad" para describir esta etapa
del desarrollo económico de China.
Para estimular el mercado y beneficiar a la sociedad, el gobierno
central ha mantenido la racionalización de la administración y ha
delegado poder a niveles inferiores, lo que ha conducido a un aumento en
la creación de negocios.
En octubre año pasado, el Partido Comunista de China (PCCh) convocó a
una reunión clave sobre Estado de derecho, con el objetivo de garantizar
la justicia para cada individuo.
La campaña contra la corrupción nunca descansa en China. El año pasado,
el ex jefe de seguridad, Zhou Yongkang, fue sentenciado a cadena
perpetua, el ex asesor político Ling Jihua fue arrestado y puesto bajo
investigación, y el ex líder militar Guo Boxiong fue investigado por
actos delictivos.
China llevó a cabo su primer desfile militar del Día de la Victoria el 3
de septiembre para conmemorar la lucha del pueblo chino y mirar hacia
un futuro pacífico.
Durante el desfile, el presidente Xi anunció que el ejército chino
reducirá sus fuerzas en 300.000 elementos, lo que demuestra el
compromiso de China con la paz mundial.
Con respecto a la visión de China sobre el mundo, la paz y el desarrollo
son las tendencias dominantes, ahora y en el futuro. Además, se enfocan
en las políticas externas de China.
Desde las plataformas multilaterales como la Asamblea General de las
Naciones Unidas hasta las bilaterales como la visita de Xi a Estados
Unidos (ambos ocurridos la semana pasada), China ha actuado como un
constructor del sistema mundial. El país ha prometido construir un nuevo
tipo de relaciones internacionales caracterizadas por la cooperación de
ganar-ganar y un nuevo tipo de relaciones entre grandes países. También
ha asumido más responsabilidades acordes con su creciente fortaleza.
Al mismo tiempo, China intenta beneficiar a otros países a través de su
propio desarrollo. El año pasado, el gobierno preparó un proyecto para
la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta de la Seda Marítima
del Siglo XXI, la red de comercio e infraestructura llamada la "Franja y
la Ruta" que tiene el objetivo de impulsar el comercio y las relaciones
con otros países.
El próximo 67° aniversario de la Nueva China también será importante.
Poco después de los siete días de vacaciones por el Día Nacional del 1
al 7 de octubre, el PCCh convocará a otra reunión clave para discutir el
XIII plan quinquenal del país 2016-2020.
El plan es importante porque para el año 2020 se espera que China haya
construido una sociedad modestamente acomodada en una forma
generalizada, que es una de las dos metas centenarias del PCCh. La otra
es construir un moderno país socialista para cuando la Nueva China
celebre su cumpleaños número 100.
En su año 67 de existencia, China continuará aplicando la estrategia de
los "Cuatro Integrales", que comprenden la construcción integral de una
sociedad modestamente acomodada, la profundización integral de la
reforma, la gobernación integral del país a través del Estado de
derecho, y la gobernación estricta e integral del Partido Comunista de
China.
La Nueva China también ayudará al mundo a la construcción de más
infraestructura con fondos canalizados por el Banco Asiático de
Inversión en Infraestructura (BAII). La cooperación de China con otros
países dará generará situaciones de ganar-ganar.
Sin embargo, el país también necesita resolver algunos retos
importantes. La presión de la contracción económica será un riesgo para
el crecimiento económico de China, y aún quedan desafíos ambientales. El
país enfrenta, además, amenazas tradicionales y no tradicionales contra
su seguridad.
Mientras siga integrándose al sistema mundial, China beneficiará a más y
contribuirá más a otros países y al mundo en general, y se convertirá
en una potencia para salvaguardar la paz y el desarrollo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario