En muchos países se recuerda a las víctimas de la masacre de Odessa

Por Rubén Díaz Belujin

Hace un año tuvo lugar un suceso que me conmovió, decenas de personas fueron quemadas vivas en la Casa de los Sindicatos en Odessa. 

Esta escalada de la violencia nazionalista contra la población trabajadora, fue el origen de que muchos ucranianos tomamos conciencia de lo que quiere imponer en Ucrania la Unión Europea: sometimiento, colonizaje y paupérrimos salarios.

Porque aquí en los países llamados del Occidente "europeo", han tratado de silenciar lo que ocurrió. Ni tan siquiera, hoy en las noticias lo han recordado. Las pantallas de televisión se inundan de chismes, futbol y violencia de los ejércitos imperialistas en Irak, Libia, Siria y Palestina. 

En Ucrania, en los medios de comunicación, hay un lamentable silencio del aniversario. Quiere que la población se olvide de la matanza. El muro del cinismo, de la ignorancia se está extendiendo entre la población ucraniana. Les están vendiendo que se busquen la vida para comer, sean contratados por un mísero sueldo, y NO PIENSEN. 

También es verdad que son una minoría, los que luchan. 

Y la mayoría de los trabajadores europeos, domesticados, no recuerdan este día. Porque la cultura proletaria, está bajo mínimos. Sino es así, ¿Dónde están los trabajadores que proclaman el internacionalismo proletario? O es que, TODO es una vacía leyenda. Por mi sangre, por mis compañeros, por mi pueblo, por lo que significó de escalada fascista, RECUERDO A LOS TRABAJADORES, que fueron asesinados por los criminales neonazis del "Sector Derecho", ayudados por la policía del gobierno "maidanista" instalado en Kiev.

Pero si tras las puertas de las fronteras de Ucrania, sólo hay ecos de lo ocurrido, aquí en Odessa, en diferentes ciudades como Járkov, Donetsk, Lugansk, los tenemos presentes.

Para la Rada Nacionalista de Kiev, los hechos son "conflictos con los prorrusos", y la justicia, no encontró culpables, pues estos se encuentran, como bien sabe toda la población, entre las fuerzas de la Guardia Nacional. La investigación de la matanza ha sido archivada. 

Pero en la mayoría de la población odessita, hay un sentimiento de repugnancia e ira contra las autoridades que autorizaron semejante carnicería. Y así, cientos de personas, a pesar de la vigilancia de los esbirros fascistas, de madrugada han salido al campo de Kulikovo, y han depositado flores. La policía hace fotos de los congregados. Pero jóvenes, y mayores recuerdan a los fallecidos. 

Cada flor es un mensaje denunciando el asesinato de ucranianos valientes, que dijeron NO AL FASCISMO. Como el diputado popular de Odessa, Oleg Kalashnikov, del periodista Olesya Bushin, quienes junto a 44 mujeres y hombres fueron asesinados.

Los habitantes de Odessa, elevan al cielo globos negros, desde sus casas. Frente a la Casa de los Sindicatos, una pequeña manifestación, fuertemente vigilada, bajo la pancarta "El fascismo no pasará" recorre el trayecto con fotos del incendio del 2 de Mayo.

En Kiev, con miedo, cientos de manifestantes exigían "Justicia a los verdugos fascistas". En Moscú cerca de mil personas se dirigieron a la embajada ucraniana, bajo el lema "Odessa, el día de la vergüenza".

En España, Madrid, delante del Museo Estatal de Arte Contemporaneo se leyó un manifiesto contra la guerra civil que está sufriendo el pueblo ucraniano, y en contra del gobierno instalado en Kiev, que quiere la aniquilación física de la población de Donetsk y Lugansk. Bajo un bandera republicana española, se exhibieron las fotos de la masacre. Se recogieron ayuda humanitaria para la población del Donbass.

En Italia, en Monza, han instalado una escultura en la plaza "Mártires de Odessa". El memorial es una inscripción donde sobre un fondo de llamas hay una paloma blanca con la inscripción "En memoria de los mártires de Odessa".

En Berlín, ha habido un concierto con mitin, dedicado al recuerdo de las víctimas.

Quizá esta artículo va contracorriente. Pero ES MI FORMA DE LUCHA.

Con él denuncio al Fascismo que realizó la matanza. Denuncio a quien lo ha parido EL IMPERIALISMO CAPITALISTA.

Y sigo confiando en la CLASE OBRERA. Porque somos mayoría. Y siguen habiendo comunistas, que luchan por EL SOCIALISMO. Esa es mi esperanza.