Comunistas bielorrusos: ¡Abajo el antiestalinismo!

Por Oleg Komolov. Enviado desde Comstol.info. Traducido por Igor T.

Declaración de la asamblea de ciudadanos de Bielorrusia y Rusia, por los fundadores de la Organización Internacional "¡Por la Tierra Madre! ¡Por Stalin! "

Minsk 24.02.2013

"Abajo con el antiestalinismo, renovamos nuestra común lucha por la patria socialista soviética y asegurar un futuro próspero para toda la humanidad"

Los enemigos internos y externos de la Unión Soviética que lucharon todos los años, desde su creación (30 de diciembre de 1922) como la primera unión de pueblos multinacionales en un estado socialista de obreros y campesinos, que surgió como resultado de la Gran Revolución Socialista de Octubre, destruyeron temporalmente sus estructuras como estado, dividiendo al pueblo soviético, para dominarlo y apropiarse de sus recursos naturales y construídos, hundiéndolo en la miseria y el sufrimiento, sin precedente siendo en realidad una política de genocidio.

El triunfo temporal de la contrarrevolución en la URSS fue capaz de llevarse a cabo principalmente porque después de la muerte en marzo de 1953, del gran camarada y sucesor de Lenin,  José Stalin; en 1956 se celebró el XXº Congreso del Partido, donde Kruschov inició y desató una campaña a escala universal de la lucha contra el "estalinismo".

El "estalinismo" en teoría era una práctica revolucionaria, pero si así fuese, sería el Marxismo-Leninismo de transición del capitalismo al socialismo a escala mundial, pero esto no sucedió, porque el explotador mundo moribundo burgués se lanzó sobre esa idea, para evitar su muerte inevitable, y así prolongar su existencia.

Los resultados de las actividades teóricas y prácticas de Stalin conducían en realidad a la apertura del leninismo socialista tras la creación de la URSS a la construcción del socialismo pleno en ella. La resistencia victoriosa al capitalismo amenaza al mundo entero, y por ello la burguesía recurrió al fascismo alemán. La recuperación rápida de la economía nacional, el camino claro a la luz del comunismo en la URSS, a una sociedad creativa, donde la humanidad pueda realizar sus posibilidades ilimitadas, a la adquisición de la energía nuclear con fines pacíficos, todo esto fue posible por la aparición del sistema socialista mundial, que alcanzó la paridad del poder con el mundo capitalista, el surgimiento de la Unión Soviética como la garantía insondable contra una nueva guerra mundial, y la declaración de luchar contra la existencia de la explotación del sangriento sistema capitalista.

Al desencadenar la ofensiva político-militar antiestalinista, la élite imperialista mundial ha logrado confundir las mentes de la mayoría de las personas que trabajan y retrasar la extinción de su sistema social inhumano. El destino de la humanidad depende ahora de si va a caer el antiestalinismo y la fuerza que acabará con el imperialismo, para impedir los planes siniestros de capital global para dominar al mundo e imponer un conjunto de regímenes neo-fascistas en el planeta.

Por lo tanto, nosotros, ciudadanos de Rusia y de Bielorrusia, fundadores de la Organización  Internacional "¡Por la Tierra Madre! ¡Por Stalin!", reunidos en la ciudad-héroe de Minsk en Bielorrusia, en relación con el 95º aniversario del Ejército Rojo (soviético) y la Armada, compuestos de obreros y campesinos, declaran su intención de hacer todo lo posible para extirpar el antiestalinismo y su destrucción como la principal desviación ideológica dentro de la esfera del capital global donde se encuentra la humanidad trabajadora.

Desechar el antiestalinismo como inicio y  a continuación lograr la victoria, es una condición ideológica sobre el imperialismo mundial, para garantizar un futuro pacífico y próspero para la humanidad.

Nuestra reunión fundacional tuvo lugar en los actos de la celebración del 95º aniversario del Ejército Rojo, y la Marina soviética, en recuerdo de su máximo dirigente, general y luego mariscal I. V. Stalin, quién fue uno de los factores decisivos de la victoria del pueblo soviético en la Gran Guerra Patria  contra los nazis invasores, que predeterminó el final de la Segunda Guerra Mundial en favor de la clase obrera de la humanidad.

Es un hecho histórico, que los soldados soviéticos entraron en batalla con el lema "¡Por la Patria! ¡Por Stalin!". Este hecho es la base para el nombre de nuestra organización. No es casual, ya que nuestra Tierra Madre Socialista, la Unión Soviética está ahora en un mayor peligro. Por su significativa unión, ha probado la gran amistad generada entre los pueblos soviéticos, que ahora están divididos por las fronteras estatales artificiales capitalistas, que son ajenas al pueblo soviético. Con esas fronteras el capitalismo estruja la riqueza generada por los trabajadores fluyendo hacia los bolsillos sin fondo de los oligarcas y el capitalismo global; todos, los niños, adultos y veteranos luchamos por nuestra propia existencia, en una serie de repúblicas se han asentado la soldadesca de la OTAN. Y debemos hacer todo lo posible por lograr la implantación de las palabras de Stalin : "¡Nuestra causa es justa. El enemigo será derrotado. La victoria será nuestra!" "¡En nuestras calles será un día de fiesta!".

Nuestra reunión fundacional se celebró en la ciudad-héroe de Minsk, la capital de Bielorrusia, para la población Stalin es nada menos que su hijo más ilustre. Y al igual que con la tierra bielorrusa, en Viskuli, tuvo lugar un ataque criminal contra la voluntad del pueblo expresado en el referéndum de toda la Unión del 17 de marzo de 1991 por la conservación de la Unión Soviética, su seña de identidad y la preservación de la memoria de sus líderes, de Lenin y Stalin, por lo que aquí reclamamos el renacimiento de la identidad leninista, de Stalin y de la URSS.

Hacemos un llamamiento a todos los ciudadanos de las repúblicas de la Unión Soviética y sus organizaciones de lucha contra el antiestalinismo, para unirse a esta Organización Internacional "¡Por la Tierra Madre! ¡Por Stalin!" Juntos lograremos abrir un espacio de prosperidad igual para todos, para lograr la paz, la justicia social y la confianza en el futuro, en términos que sólo se puede obtenerse en el camino de la gran herencia comunista de Marx, Engels, Lenin y Stalin.