El día 21 de Mayo, a las 19.30 hs. en el Ateneo de Madrid, en la calle del Prado, nº 21, proyectaremos la segunda parte de esta memorable película. Después de su visión mantendremos un agradable debate con los aspectos más interesantes del filme.
Esperamos vuestra asistencia.
Ponencia de la Asociación.
Siberiada «Сибириа́да»
Año 1978
Duración 275 min.
País Unión Soviética.
Dirección: Andrei Konchalovsky
Guion: Andréi Konchalovski, Valentín Yesov
Música: Eduard Artemyev
Fotografía: Levan Paatashvili
Reparto: Vladímir Samoylov, Vitali Solomin, Nikita Mijalkov, Natalya Andreychenko, Lyudmila Gurchenko, Sergey Shakurov, Maxím Munzuk
Productora: Mosfilm
Sinopsis
En una aldea de los confines siberianos, Yelan, viven en continuos choques dos familias, los Solomin y los Ustuizhanin. Los Solomin son kulaks, ricos y muy autoritarios. Los Ustuizhanin son pobres labriegos, durante muchas generaciones jornaleros de los primeros.
Pero triunfa la Revolución Socialista Bolchevique en Noviembre del 17, del siglo pasado. A la aldea con bastante retraso llega la noticia, y alborozados los pobres pobladores, incluídos los Ustuizhanin, proponen cambiar las constumbres, dando el poder de los ricos a la mayoría de los oprimidos.
Mas, los Solomin están en contra de los cambios y de la nueva sociedad socialista.
Impresionante trabajo de producción
Dividida en cuatro partes:
1ª Parte, se compone de dos capítulos:
Afanasi. El Comienzo del siglo.
1907. En el pueblo siberiano de Yelan, viven dos familias: los Ustyuzhanin y los Solomin. Afanasi Ustyuzhanin, quien una vez fue el mejor cazador de la aldea, abandonó todo, y durante muchos años ha estado desbrozando una senda en la taiga, en dirección a la estrella más brillante llamada “la crin del diablo”. Su hijo Kolia roba comida de un almacén propiedad de los ricos Solomin. La amiga de Kolia, Nastia Solomina, lo atrapa en el acto. Le propone darle albóndigas, si corre desnudo por la nieve. Kolia, pasa la prueba, lleva parte de la comida a Rodión Klimentov, un terrorista fugitivo de Narodnaya Volya*, cuyas ideas (así como las ideas de Campanella sobre la Ciudad del Sol, de la que le habla Rodion) causan una fuerte impresión en el niño. Mas, Rodion días después, es detenido por los gendarmes. Al despedirse, Klimentov le da a Kolia un trozo de la cadena cuando estaba en prisión.
También en la primera película aparece un misterioso habitante del bosque: el Abuelo Eterno. A pesar de que la epopeya dura unos sesenta años, el Abuelo Eterno aparece en cada película a la misma edad, y los lugareños, representantes de distintas generaciones, siempre lo reconocen, aunque no lo hayan visto nunca en su vida.
*Narodnaya Volya “Voluntad del Pueblo”. Grupo revolucionario creado en 1879, con la idea de destruir la autocracia zarista mediante los asesinatos de sus dirigentes. En 1881 acabaron con la vida del zar Alejandro II. La organización destrozada por las detenciones y exilios de sus miembros desapareció en 1884.
Anastasia. Años Veinte.
1918. Los maduros (Kolia y Nastia) Nikolai y Anastasia, están juntos, enamorados. Nikolai se entera de la Revolución de Octubre, y comprende que no pueden permanecer al margen de los cambios en las relaciones sociales. Los "kulaks" encarnados en los Solomin, van a estar en contra. Anastasia defiende a su familia, y en venganza se casa con un pariente lejano Filipp Solomin. Pero éste sabe que ella no le quiere. Nikolai pide disculpas a Nastenka, pero ella lo avergüenza frente a todo el pueblo, y los Solomin lo golpean y expulsan de Yelan. Le tiran a una barca malherido, dejándole que se lo engulla la corriente del río. El mismo día, Afanasi Ustyuzhanin fallece de un infarto. Mas, Anastasia comprende que su vida va en ese bote, lo alcanza, y remando se va con Nikolai.
2ª Parte, que también se compone de dos capítulos:
Nicolai. Hijo de Afanasi. Años Treinta.
1932. Nikolai es un bolchevique del Ejército Rojo, quién luchó contra el Ejército Blanco, contrarrevolucionario (su Nastenka ya ha muerto en aquellos azarosos años). Llega a la aldea, para el desarrollo social y económico soviético de la vida campesina, compartiendo los recursos y materias primas, para todos. Nikolai trae a su hijo Aliosha. Filipp Solomin, quien también abandonó el pueblo, ingresó a la academia y se casó. Nikolai agita a los aldeanos para que continúen la construcción del camino de la “crin del diablo”, que comenzó su padre, para colocar allí una plataforma de perforación de petróleo, en beneficio del socialismo. Solo se niega el hermano de Anastasia, Spiridón Solomin, quien no perdona a Nikolai la muerte de su hermana y es un oponente al poder soviético. Nikolai lo arresta y lo envía a la ciudad. Los aldeanos están construyendo el camino en condiciones muy difíciles, abriéndose paso entre pantanos y bosques. Debido al duro trabajo, el jefe del clan Solomin, Erofey, muere. Nikolai y su hijo descubren una salida de gas natural a la superficie en Chertovaya Griva y casi mueren. Spiridón, habiendo escapado del arresto, mata a Nikolai. Alyosha huye del pueblo.
Taya. Años Cuarenta.
1941. En vísperas de la Gran Guerra Patria, Alexéi (Alyosha), después de haber escapado del orfanato, llega a Elan para llevar a la cárcel a Spiridón por el asesinato de su padre. La joven Taya Solomina lo encuentra inconsciente y se enamora de él. El abuelo eterno cuida de Alexéi. Del Abuelo Eterno, Alexéi se entera de que Spiridón ha estado seis años en prisión por el asesinato del padre de Alexéi. Hay una movilización general debido a la invasión nazi de la URSS. Un comisario militar llega a Yelan y un menor de edad, Alexéi, se inscribe como voluntario en el ejército. La llorona Taya se despide de él y le dice que lo esperará al menos toda su vida. Los perforadores han estado trabajando en “camino del Diablo” durante ocho meses, pero el comisario militar no les permite terminar el trabajo.
3º Compuesto por el capítulo:
Alexéi, hijo de Nicolai.
El prólogo muestra una escena de los años de la guerra, cuando Alexéi, un soldado de la inteligencia militar de la Infantería de Marina, salva de la muerte a un capitán de segundo rango, sin saber que se trata de Filipp Solomin. Tras el final de la guerra, Alexéi se convierte en maestro perforador y, junto con su brigada, llega a Yelan. Estamos en año de 1962. Ustyuzhanin se encuentra con el anciano Spiridón, pero muestra con su apariencia que no se vengará del asesinato de su padre; en cambio, él y sus camaradas instalarán una plataforma de perforación, demolerán Yelan y construirán “la Ciudad del Sol” en el mismo lugar. Tofik Rustamov, un geólogo de Azerbaiyán, quien le prometió a Alexéi que perforarían petróleo en Chertovaya Griva, pero no lo hace y perfora muy cerca de Yelan, según una directiva de Moscú. Alexéi, que ha olvidado a Taya durante muchos años, la vuelve a encontrar. Taya reanuda su relación, pero después Alexéi la abandona durante dos meses, ocupado trabajando en una plataforma de perforación. Cuando vuelve a visitarla a Taya, resulta que Tofik vive en su casa (en el momento cuando él está en el baño ruso). Enfurecido por este giro de los acontecimientos, no se da cuenta de sus actos Alexéi, cometiendo un grave error mientras trabaja en la plataforma de perforación, y así la tubería de perforación cae al pozo.
4º Desarrollado por el capítulo:
Filipp. Años sesenta.
Filipp, quien ocupa el cargo de primer secretario del comité regional, intenta resistir la construcción de la central hidroeléctrica más poderosa del mundo en la región, ya que su construcción provocará la inundación de una vasta extensión de terreno en la región, incluido su pueblo natal de Yelan. Solo el descubrimiento de yacimientos de petróleo en la región puede salvar la situación. Al llegar a Yelan, Filipp se encuentra con Alexéi, pero al principio no se reconocen. Alexéi, después de haber discutido con Tofik, decide irse e invita a Taya con él. Ella le informa que está embarazada y se niega a irse. Al salir de la casa, Alexéi escucha ruidos de la plataforma de perforación. Corre hacia allí y ve cómo una poderosa fuente de aceite se eleva sobre el pozo. Hay un incendio y un accidente. La torre caída sepulta a uno de los trabajadores: Sanya. Alexéi se apresura a ayudar a su camarada, lo salva, pero él mismo muere en el proceso. Más tarde, en Moscú, Filipp, después de recibir un telegrama, se entera de la ubicación del petróleo y el gas, así como de la muerte de Alexéi Nicolaévich Ustyuzhanin en un accidente. En ese momento recuerda a Alexéi, el hijo de Nikolai, el soldado que le salvó la vida durante la guerra. En un congreso de trabajadores petroleros dedicado al tema de Siberia y la búsqueda de campos de petróleo y gas, Filipp informa que se han encontrado grandes reservas de petróleo allí y que falleció un hombre, un soldado y trabajador de choque, Alexéi Ustyuzhanin, en un accidente. Pide a todos que honren la memoria del difunto con un minuto de silencio. Al final de la película, Spiridón se entera por Taya de que la familia Ustyuzhanin tiene continuación a través de ella en un hijo de Alexéi.
El final es armónico. En el incendio y destrucción del cementerio de Yelan, Filipp se encuentra con todos los héroes vivos y muertos de la película, sus familiares y amigos, vivos en su memoria.
Un canto a Siberia, en una obra de arte imprescindible de ver.
SIBERIADA, es una importantísima saga histórica de los pueblos eslavos de fines del XIX hasta el siglo XX. Desde su estreno, se ha considerado una de las películas soviéticas más influyentes en el devenir de la cinematografía mundial. Silenciada por las grandes distribuidoras del mundo capitalista, aún hoy sigue alejada del mundo de la cultura, a pesar de su importancia técnica y narrativa.
La película "Siberiada" fue en principio un encargo estatal cinematográfico. En 1974, Andréi Mijalkov-Konchalovski es convocado por el presidente de la sociedad estatal Goskino, Filipp Yermash, ofreciéndole realizar una película para el próximo congreso del PCUS, sobre la vida de los trabajadores petroleros. El director accedió y comenzó a desarrollar con su equipo de guionistas la concepción de la historia. Mientras trabajaban sobre el tema principal a desarrollar, los petroleros, al plasmar los diferentes guiones comprenden que la película ha rebasado los marcos propuestos, y se ha convertido en un fresco monumental de la colisión de generaciones y los destinos de cada ser humano.
Andréi llama a esta nueva forma de contar relatos el “poema de seis cuentos".
La línea "petrólera" de la película está basada, en la lucha que durante mucho tiempo sostuvo el héroe del trabajo socialista Farman Kurban oglu Salmanov, por encontrar petróleo en la región de Tiumen a fines de la década de 1950.
Para realizarla no se centraron en un lugar determinado, sino en “la tierra al borde del mundo conocido”. La taigá es ese borde espacial, y por eso no había una localidad ideal de rodaje, pues allí era particularmente complicado, por las dificultades de lejanía y temperaturas extremas. Después de buscar durante meses un entorno agreste y a la vez cercano, decidieron construir Siberia en la región de Kalinin (Tver actualmente), en particular las colinas Savinsky del distrito de Torzhok, en la época prerrevolucionaria y soviética, donde por un milagro había un rincón extraordinariamente muy bien conservado de naturaleza virgen.
Así los actores, actrices, cuerpo de cámaras y tramoyistas se desplazaban durante una hora y media por carretera desde Moscú al “pueblo siberiano”. Y esta elección fue esencial, pues muchos participaban en obras de teatro u otras películas. Así, cada participante sabía de antemano su labor y repetidamente hacían el trayecto.
La aldea de Yelan, fue desde el principio para los artistas y trabajadores el objeto principal de trabajo. Un enorme paisaje de naturaleza exuberante, chozas creadas con impresionante troncos de árboles, aceras de madera, viejas puertas talladas traídas de Perm, ganado, caballos, vacas y todo lo demás que se pudo ver en el pueblo.
Pero también era necesario rodar las imágenes de la taigá. Para ello se rodó en las cercanías de Tomsk, Siberia, cerca del pueblo de Nagorny Ishtan.
El director Andréi Konchalovski y los actores principales Nikita Mijalkov, Lyudmila Gurchenko y Natalia Andreichenko presentaron la película en el Festival de Cine de Cannes de 1979. Al concurso se envió una versión abreviada de 3,5 horas de "Siberiada.
Konchalovski insistió en que se hiciera un intervalo de cinco minutos entre la primera y la segunda parte de la película, ya que temía que el público no pudiera soportar su visión sin descanso. Más tarde, Lyudmila Gurchenko recordó: “Teníamos miedo de esta ruptura. ¿Y si se van y no vienen? Esos cinco minutos fueron como una eternidad. Miramos las sillas vacías, temerosos, nos mirábamos a la cara. Todos estábamos pensando lo mismo”. Sin embargo, después del intermedio, el público volvió, e incluso antes de que terminara la película, comenzaron los aplausos en la sala, que se convirtieron en una gran ovación al final.
La presidenta del jurado del festival, Francoise Sagan, en una entrevista con Konchalovski, dijo que había presentado una solicitud de renuncia al jurado, si Siberiada no compartía la Palma de Oro -principal galardón del festival- con la película Apocalypse Now de Coppola. Sin embargo, el escándalo fue acallado por parte del jurado convenciendo a Sagan, porque el premio no podía dividirse, mas después así se hizo y las películas Apocalypse Now y El tambor de hojalata compartieron el premio, mientras que Siberiada recibió el segundo premio, la Palma de Plata, bastante menos importante.
Su electrizante música
Antes del inicio de la filmación, Konchalovski le propuso a Eduard Artemiev, que se hiciera cargo de la banda sonora, pues Andréi deseaba unas melodías ligadas con tonadas electrónicas. Eduard había experimentado una serie de partituras muy avanzadas con ideas nuevas, para las películas de Tarkovski “Solaris” y “Stalker”.
Así toda la banda sonora, fue muy diferente y profundamente innovadora. En aquellos años había una nueva búsqueda fondos interpretativos asociados a la música electrónica, el más representativo era el grupo “Vangelis”. Artemiev, por su parte estableció una serie de temas melódicos, con fuertes estallidos de inusuales impactos sonoros, bastante singulares.
De hecho, atrapó a los compositores soviéticos esa nueva forma de encarar los acontecimientos visuales. Así, el tema musical principal de la película, “Смерть героя” ("La muerte de un héroe") empezó a utilizarse como música de fondo del Festival Internacional de Cine de Moscú.
Vida de Eduard Artemiev.
Eduard nació en 1937 en Novosibirsk. En 1960 concluyó sus estudios en el Conservatorio de Moscú. Compositor de música electrónica y de bandas sonoras de películas, fue galardonado en tres ocasiones con el premio Nika (el equivalente ruso de los Oscar) por sus trabajos para el cine.
Habitual colaborador de Andrei Tarkovski, compuso para él la música de Солярис (Solaris) en 1972, Зеркало (El espejo) en 1974, o Сталкер (Stalker) en 1979. Ha trabajado en la casi totalidad de las cintas de Nikita Mijalkov, entre ellas Свой среди чужи, чужой среди своих (Amigo entre mis enemigos), en 1974, Раба любви (Esclava del amor) en 1976, “Сибирский” (Siberiada) de Konchalovski (1979), Несколько дней из жизни И.И. Обломова (Algunos días de la vida de Oblomov) en 1986, Город Зеро (Ciudad cero) de 1989 para Karen Shakhnazarov, Урга - территория любви (Urga, el territorio del amor) en 1991, Утомленные солнцем (Quemado por el sol) en 1994, o Сибирский цирюльникъ (El barbero de Siberia) en 1998.
Los caminos abiertos por la película.
"Es una película", dice su director, "sobre los cambios de pensamientos y mentalidad de una nación a lo largo de un siglo. Estos cambios siempre van seguidos de sufrimientos, porque comprenden la destrucción de algo que existe. Es el problema de lo antiguo y lo nuevo. He querido captar el reflejo de estos cambios en la vida cotidiana de un pueblo perdido en la taigá siberiana, muy aislado, muy lejos de la civilización, que vive una vida natural, primitiva, muy fuerte y sana, porque sus habitantes tienen una relación directa con la naturaleza. Cada diez años se producen cambios bajo la presión de las fuerzas económicas y políticas que cada vez desarraigan más a sus habitantes y les alejan de sus tierras".
En la pantalla aparecen los elementos convencionales de una aldea rural, con sus convivencias forzadas y arcaicas actitudes. Pero lo que estaba sucediendo en Rusia se salía de los parámetros establecidos, apoderándose de una nueva visión social y de las relaciones de la humanidad… y a este perdido punto siberiano, por múltiples sucesos, los vínculos con los escenarios colectivos, van siendo superados por la realidad de la lucha de clases.
La película fue construida a partir del formidable legado real de la historia de Siberia. Pero contarla con la herramienta del materialismo científico era un gran reto. Y con profunda sencillez se abre paso. Las líneas históricas y dialécticas van construyendo un nuevo árbol de relaciones sociales, imprescindibles para entender la belleza de la relación naturaleza-ser humano, no excluyentes sino inclusiva.
Así, ha sido impregnado todo el cine soviético desde su fundación, ese realismo mágico lleno de metáforas y símbolos, de obstáculos e ilusiones, que hayan salida en ese camino socialista por construir una mejor sociedad.
El pueblo herido en los pantanos es el propio país. La imagen de la senda de la "Crin del diablo", donde se encuentra el gas, que va fundiendo la oscuridad, el cambio de rumbo hacia lo desconocido, a pesar del miedo, es el impacto de las ideas revolucionarias. Toda la película es un canto al futuro, que será mejor, que avanzará a pesar de las tinieblas, que es como actuaba y creía el pueblo soviético....
Para ello las imágenes tenían que serlo todo, el guión dramático fue construido sobre los temas polares: la infancia y la vejez, el amor y la muerte, la paz y la pasión. Temas que se entretejían valientemente sin cadenas de inútiles montajes, unos sobre otros. Es como digo, una muestra realista honesta que desarrolla la vida, bordeada de alegorías y símbolos. Relaciones pasionales equívocas pero profundas, junto a soluciones argumentales precisas, para que siguiéramos cada espectador también apasionado en una atmósfera de acción, para un futuro sugerido.
El camino de Levan
Y la luz condensada en los fotogramas, es otro personaje recreado por Levan Pataashvili. Tiene su propio argumento de existencia y fenecimiento, su explosiva eclosión y súbito desfallecimiento. Expresa sentimientos, crea un ambiente que contribuye a realzar las contradicciones de los pensamientos imbuidos en cada personaje. Es un lenguaje claro, impreso con una técnica muy depurada que estimula el cerebro del espectador con una brillante precisión y sutileza.
Como muestra, nuestra apertura óptica a la luz que emana del celuloide, ajena a la luz artificial, como es el nacimiento de la llama de una vela. Este efecto captado por la cámara es de singular belleza. Rompió los moldes artificiosos de rodaje, pues sigue las ondulaciones transmitidas por su parpadeo, uniéndose a otras velas que se van entrelazando como en un baile, lento y de gran belleza, imposible de imitar artificialmente.
No es de extrañar el impacto que tuvo sobre los especialistas occidentales, que a partir de entonces empiezan a imitarlo, sin mencionar a Levan. Igualmente hizo un protagonista importante la luz natural. Esa claridad, que se funde a la nieve, que nos introduce a un espacio íntimo de fusión con la naturaleza, es en sí un poema de variadas facetas, buscadas con ahínco para que fuera un deleite su visionado.
Posiblemente Andréi tuvo que investigar y desechar mucho de lo rodado, para localizar un exacto lenguaje de aproximación al desarrollo de las historias de la saga.
Crea
un micromundo encerrado en sí mismo pero que se ve condicionado por
acontecimientos que transcurren lejos de sus tierras. Siberia, el nombre mismo producía temor. Lugar ignoto,
de destierro, donde se destruía las aspiraciones y los sueños.
Hay un hilo conductor del argumento, conscientemente imbuído: no se puede vivir de espaldas a la historia porque la historia acabará por arrastrarte. Los campesinos siberianos, son seres de profundas querencias, despreocupados de lo que transcurre fuera de su terruño, de su pequeño mundo, condicionado por unos inviernos muy crudos y duros. La vida es inhóspita pero en cierto modo tiene una cadencia majestuosa y tranquila.
Espléndidamente contada, con un metraje condicionado por cada espacio de tiempo y contradicciones sociales, realizándose una extraordinaria película, llena de bellos hallazgos y acabados perfiles cinematográficos. Es de los filmes que crean entusiastas seguidores del 7º Arte.
Y es una auténtica condena para la población española, pues no ha visto la película. Pero peor es, que aún hoy no vuelva a proyectarse en los medios culturales. Su visionado, como en su día ocurrió en la URSS, apoya ese canto a la esperanza por un futuro mejor, para la dicha de los pueblos, aunque sea en los rincones más remotos.
Enlaces consultados.
· Andréi Konchalovsky. “Elevando lo engañoso”. — Editorial. “Top Secret”, 1999. — 384 p. - 82.000 ejemplares. — ISBN 5-89048-057-x. (En ruso) Андрей Кончаловский. Низкие истины. — М.: Совершенно секретно, 1999. — 384 с. — 82 000 экз. — ISBN 5-89048-057-x. (https://archive.org/details/vozvyshaiushchii0000mikh)
· Levan Paatashvili. "Siberiada". “Medio siglo junto a la muralla de Leonardo. De la experiencia de la profesión de un operador cinematográfico”. 2006. (En ruso).
https://photographerslib.ru/books.php?book_id=0021.0001.
Леван Пааташвили. «Сибириада» // Полвека у стены Леонардо. Из опыта операторской профессии.
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