Extraído de la Asociación de Amistad con Corea en el Estado Español
Este pasado enero, se dio en Corea lo que viene siendo algo habitual, pero que sin duda sorprendería a cualquier occidental: desde primera hora de la mañana, cuadros y trabajadores de la administración central, del gobierno, de los ministerios y, en general, de las instituciones dedicaron el viernes al trabajo voluntario en el campo.
Este apoyo tiene un doble objetivo en Corea:
Por un lado, se busca asegurar el compromiso ideológico de las personas en puestos de responsabilidad, a través del trabajo práctico (de "ensuciarse las manos") en apoyo a la población rural, recordando además las raíces de una revolución que nació en el campo.
Por otro lado, se busca apoyar con trabajo manual los picos de trabajo rural en momentos clave.
Esto tipo de compromiso es constante y forma parte de las medidas encaminadas a crear una sociedad unida y cohesionada, en la que el gobierno también trabaja junto al pueblo y el pueblo participa a todas los niveles en la toma de decisiones.
1 comentario:
Es muy recomendable y reproducible el artículo titulado "El vampiro bacardiano pierde un colmillo en Los Madriles".
Saludos.
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