26 de febrero de 2011

Transformación económica, cultural, política y social



Extraído del blog.jesúsmanuelsilva


Escrito el 23.12.10
Para la burguesía hay legalidad cuando el Estado se apoya en leyes que le faciliten persuadir al pueblo sobre la validez de sus actos aunque sean injustos. El capitalismo ha hecho legal que la clase trabajadora sea explotada al recibir un salario inferior al valor real de su labor, pues la plusvalía fue inculcada culturalmente y ello explica que todavía muchos pueblos elijan como gobierno a sus propios verdugos burgueses.


Admirable es la legitimidad, porque se basa en una actuación fiel a la justicia, la igualdad social y a revolucionar las leyes de una época injusta. Legítimo es el proyecto de convertir la propiedad y el buen vivir en una imperativa retribución al trabajo de todas las personas y así erradicar los privilegios de las minorías.


La revolución pacífica enfrenta el desafío de la popularidad, que significa ganar el respaldo mayoritario de todos los sectores sociales que han sido históricamente excluidos, no sólo para que mediante sus votos garanticen la continuidad del proceso revolucionario, sino para protagonizar masivamente la transformación económica, política, social, intelectual y cultural que fortalezcan a la sociedad naciente.


Los avances al socialismo plantean la inevitable agudización de contradicciones entre un polo revolucionario y un polo conservador, ambas vanguardias, con sus valores ideológicos y fuerzas materiales, tienen opciones para conquistar la popularidad que les acredite el triunfo político, pues a lo largo de la historia no todo lo justo ha sido popular, ni todo lo popular ha sido justo.


Escrito el 06.02.11
La ideología revolucionaria es el método científico que permite conocer la realidad mediante la observación sobre los fenómenos sociales, determinar los nexos entre factores generales e individuales y así precisar las leyes que determinan el rumbo de la historia. Se trata de una teoría dialéctica que se ajusta a las condiciones objetivas y subjetivas de cada escenario sociohistórico para orientar al pueblo en la estrategia hacia su liberación clasista.

El análisis coyuntural es la técnica auxiliar que estudia los problemas sociales y políticos puntuales derivados del comportamiento de las clases, bloques y vanguardias que aspiran conquistar la hegemonía social en una época. Su meta es identificar las acciones idóneas para favorecer o dificultar el logro de los objetivos políticos (propios y ajenos) y administrar sus efectos.

La propaganda es la síntesis de las ideas emanadas de la ideología y el análisis, desarrolla la infatigable agitación y difusión del pensamiento liberador al interior de las masas para fortalecer su compromiso consciente con el programa revolucionario. La línea propagandística, una vez discutida y aprobada por la dirección colectiva, debe ser adoptada disciplinadamente por los revolucionarios.

Toda revolución requiere el apoyo de estas tres tareas (cada una nítidamente diferenciada, pero todas importantes) debido a que la histórica misión de implantar la igualdad de clases sociales siempre ha exigido avances grandiosos de la conciencia colectiva.

Frente al empirismo pragmático, levantemos la teoría.



No hay comentarios: