30 de julio de 2016

Avance extraordinario de la sanidad socialista: Cuba podría haber encontrado la cura definitiva contra el cáncer.

Por Miradas Encontradas

 


Los médicos cubanos han presentado este miércoles, en La Habana, el resultado de 14 años de investigaciones, una solución de péptidos antitumorales cuyo análogo natural es capaz de ofrecer una dinámica positiva en los tratamientos oncológicos.

Según los especialistas cubanos, lo que hace única esta solución de péptidos es que puede actuar en aquellas zonas del cuerpo humano que son imposibles de operar o tratar con quimioterapia u otras terapias modernas.

Un ejemplo claro del éxito del nuevo método es el niño Leo, que padece cáncer cerebral. Ahora el muchacho parece un chico común y corriente y es difícil adivinar a primera vista que hace solo unos meses le ganó una batalla a la muerte.  El lugar donde Leo tenía el tumor no permitía someterlo a la operación que necesitaba, ya que corría un gran riesgo de perder la vida. El único posible remedio para el menor era el fármaco desarrollado por los investigadores cubanos del grupo empresarial Labiofam, basado en péptidos naturales. 

Aunque el medicamento todavía pasa por la fase experimental, ya ha dado muestra de sus efectos curativos. La especialista en ensayos clínicos de Labiofam Niudis Cruz Zamora, ha presentado a RT la prueba de la eficacia del nuevo producto mostrando la dinámica positiva en el tratamiento de Leo.”El paciente empezó con una lesión inmensa que medía en altura 32 milímetros, gran hidrocefalia y durante los siete meses que estuvo encamado solamente se le trató con la solución de péptidos naturales. La altura disminuyó de 32,4 a 27,1 y para mayo de 2013, la lesión alcanzó su tamaño mínimo”, explica la científica. Entre los pacientes  tratados con la solución figuran personas con la enfermedad en estado avanzado, que no tienen alternativa oncológica. “Yo estaba mal, como un vegetal, no podía hacer nada, no podía caminar, no podía hablar, hablaba enredado; para mí esto fue un gran avance”, confiesa Yarislenis Abreu Castaneda que ha podido recuperar una vida normal gracias a la innovación de Labiofam.

Los especialistas afirman que gracias a su impresionante efecto, que mejora la calidad de vida de los enfermos, la solución fue la base para una medicina que podría convertirse en una arma definitiva contra el cáncer. Según representantes de la entidad, el producto podría revolucionar el mercado, ya que no se habla de falsas expectativas sino de pruebas sólidas efectuadas en animales que demostraron que se logra la reducción del 90% del tumor y en algunos casos su desaparición casi total.  

”No existe en la base de datos internacional ningún principio activo con efectos similares”, asegura el investigador científico de Labiofam, Alexis Díaz García. “Estamos previendo que pueda convertirse en una futura formulación que pueda resolver los casos de cáncer que no tienen solución, estamos hablando de cáncer de mama, colon, próstata, que ocupan los primeros lugares de mortalidad”, agregó.

Sin embargo, los planes de la empresa van más allá de la curación. El director del grupo empresarial, José Antonio Fraga, ha afirmado que “este producto va a ser efectivos tanto en el tratamiento de los enfermos como para la prevención de la enfermedad”.

Los gerentes del Centro de Investigación de Cuba están seguros de que la producción del innovador fármaco supondrá un paso trascendental en un futuro cercano para hacer frente a este mal que  siega anualmente millones de vidas.

Signos socialistas alentadores y estratégicos

Por Ernesto Wong Maestre

Una amplia y larga jornada la transcurrida en Venezuela en la que las fuerzas revolucionarias y pacíficas, no dispuestas a caer en la trampa de la violencia contrarrevolucionaria, han dado muestras claras de la decisión de solucionar los problemas de alimentación, creados por la burguesía parasitaria, a través de la amplia participación y protagonismo del pueblo consciente que se ha expresado de muchas formas.

Por parte del Gobierno Nacional se hizo el anuncio histórico de organizar la Gran Misión Abastecimiento Soberano (GMAS) bajo la dirección cívico-militar del camarada obrero y Presidente Nicolás Maduro y del camarada Ministro de la Defensa, MG Vladimir Padrino López. Un tipo de dirección estratégica necesaria para enfrentar con éxito la guerra económica lanzada por esa burguesía parasitaria contra el pueblo y las acciones desestabilizadoras externas provenientes de esas instituciones imperiales de naturaleza militar, financiera y mediática interesadas en apoderarse de los ricos recursos naturales, renovables y no renovables, y estratégicos que el Gobierno Revolucionario ha decidido colocarlo en explotación para continuar profundizando y ampliando la gestión social y el vivir bien de todos y todas en Venezuela.

La GMAS es un gran proyecto diseñado con visión de la totalidad y con una mayor claridad de las causas y condiciones que han originado el desabastecimiento de productos de consumo popular, la especulación de precios, la usura y la revendedera de productos de la cesta básica. De ahí que sea muy importante la comprensión del tipo de dirección establecida ya que las medidas, tanto punitivas como benéficas deben ser de impacto masivo por lo que deben actuar los distintos poderes del Estado respaldados por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).

Lamentablemente, el poder legislativo ha sido controlado en sus decisiones por la burguesía parasitaria que ganó una mayoría el 6D engañando y falseando la realidad. Más nos han dominado por la ignorancia que por la fuerza, nos decía siempre El Libertador, Simón Bolívar. Esa mayoría burguesa de la Asamblea Nacional que aprueba todo tipo de supuestas leyes que deben aplicarse, busca reforzar su poder como clase y actúa ambiciosamente en contra de los intereses de la clase obrera, con una conducta traidora a la Patria y un comportamiento deleznable por incitar a la violencia y a que Venezuela sea invadida por EEUU. Pero no podrá vencer el imperio –lo declara la clase obrera en cada una de sus actividades- porque ¡el pueblo salva al pueblo! Y la Revolución está para garantizarlo.

Por todo ello, las respuestas de la clase obrera y de los trabajadores y trabajadoras consciente del momento histórico que vivimos, sea ante la acción desestabilizadora del consorcio Polar u otras empresas capitalistas, como ante el abandono de la producción y la ida para el exterior de los capitalistas dueños de la filial de la Kimberly Clark en Venezuela, son esas expresiones revolucionarias que alientan, estimulan y dirigen realmente el proceso de transformaciones sociales de la Patria de Hugo Chávez Frías.

La demostración dada este fin de semana (16 y 17 de julio) por todos los dirigentes y líderes obreros de las empresas básicas, estratégicas y socialistas reunidos en el Centro de Formación Simón Rodríguez de San Antonio de los Altos, junto a sus ministros Juan Arias, organizador de ese 1º Encuentro, y de Osvaldo Vera, velador también del carácter clasista de la actividad, y ambos decididos impulsores de las políticas económicas y sociales de la Revolución, resultó todo un paradigma socialista de gestión que marcará un hito significativo en esta historia de emancipación social, porque provenientes desde la base, de las propias empresas recuperadas, se escucharon ideas, quejas, propuestas, sugerencias y hasta reconocimientos al colectivismo, con esa vitalidad, frescura y direccionalidad que solo las revoluciones sociales pueden exhibir en el mundo de hoy.

Fuente:

David Harvey: “Estamos volviendo a las condiciones de trabajo del siglo XIX, que es a lo que apunta el proyecto neoliberal”

Por Alexandra Prado Coelho, en La Haine

Harvey

En la crisis del mercado inmobiliario de 2007-2008 en los EE.UU., mejor hubiese sido dar dinero a la gente para que pudiesen pagar sus deudas a los bancos y continuar en sus casas, en lugar de dársela a los bancos que “sólo se salvaron a sí mismos “, sostiene el geógrafo británico David Harvey.

Cuando se quiere presentar a David Harvey se suele usar dos palabras, “geógrafo marxista”. Esto es una reducción para describir a este británico de 81 años que desde hace varias décadas vive en EEUU, donde es profesor de Antropología y Geografía de la Universidad de la Ciudad de Nueva York. Autor de más de dos docenas de libros, es profundamente crítico del sistema capitalista, que analiza a la luz de las teorías marxistas, y es un defensor de la idea del “derecho a la ciudad”, que incluye las exigencias actuales de la calidad de vida en las ciudades. En su página web (davidharvey.org) ofrece un curso en video de ayuda a una lectura contemporánea del Capital, de Karl Marx.

Harvey fue orador invitado en la inauguración de la conferencia IX Congreso Portugués de Sociología, del 6 al 8 de julio en la Universidad de Algarve. Comenzó su discurso de dos horas hablando de la cantidad de cemento que China consumió los últimos tres años, “más que los EEUU en todo el siglo pasado.” Según Harvey fue China la que “salvó al capitalismo de la gran depresión que pudo haber ocurrido” tras la crisis que comenzó en 2007-2008 en los EEUU, con el estallido de la burbuja inmobiliaria. Una de las consecuencias de esta crisis ha sido un enorme aumento del desempleo en China, que es uno de los principales proveedores de materias primas para la construcción en EEUU. Para absorber esta masa de parados y evitar el malestar social, China se lanzó a un auge de la construcción (que según cifras citadas por Harvey, absorbió 27 millones de trabajadores), creando nuevas ciudades, algunas todavía sin habitantes.

La carrera por construir, dice el geógrafo, es una salida clásica de las crisis: fue lo que hizo EEUU cuando tuvo que absorber los soldados que regresaban de la Segunda Guerra o lo que hizo Luis Bonaparte en la Francia del Segundo Imperio, a partir de 1848. En todos estos casos “fue la urbanización lo que salvó la economía capitalista del colapso económico.” Pero, recuerda Harvey, esto se hace a costa de un enorme aumento de la deuda pública.

El gran problema, señala, es que “las nuevas formas de urbanización son una locura, no sólo por la escala y el hecho de que las ciudades se llenan de casas vacías que se compran más que nada para especulación y no para vivienda”. Hoy en día, gran parte del capital se concentra en "bienes raíces y rentas”. Y, advierte Harvey, el malestar social está surgiendo vinculado cada vez más a las cuestiones de la vida cotidiana en las ciudades, como ocurrió en Brasil en las protestas que estallaron en 2014 por el transporte público. Al final de la conferencia, el geógrafo habló con el público acerca del “Brexit”, el futuro del trabajo, las crisis y las posibles alternativas al capitalismo.

ENTREVISTA

- ¿Ves al “Brexit” como la democracia funcionando, una distorsión de la democracia en la que las personas han sido manipuladas, o una forma de protesta contra la desigualdad?

En primer lugar, hay una pregunta en cuanto a lo que constituye la democracia. Tenemos democracias parlamentarias en que la mayoría de las decisiones se toman en otros lugares, hay un déficit democrático en los EEUU y Europa. No entiendo por qué el primer ministro británico David Cameron convocó a un referéndum que era una locura. Creo que nunca creyó que perdería. El resultado debe ser interpretado como un gran voto de protesta. Es el equivalente a decir “no”, y la gente habría dicho “no” a casi todo.

Hay un enorme descontento que fue canalizado en esta votación. Una parte no tiene nada que ver con la UE, sino contra la forma en que las élites toman las decisiones, les dijeron que estas decisiones beneficiarían a todos, y la mayoría no ve ningún beneficio en su nivel de vida o su ingreso. De hecho, muchos han perdido en los últimos siete u ocho años.

Hay algunas buenas razones para que la gente se pregunte sobre para qué quieren esta UE cuando hace lo que hicieron Grecia y ahora está amenazando con hacer a Portugal. Se supone que es una unión de ayuda mutua y parece ser cada vez más una unión de los grandes sin ningún sentido para los pequeños. Por eso hubo algunas buenas razones para el voto, más allá de lo que comúnmente se conoce como xenofobia. Hay un lado de la xenofobia, pero sería erróneo interpretar el voto únicamente como resultado de eso.

Se argumenta que el descontento de la población tiene más que ver con las condiciones de vida en las ciudades que con problemas de desempleo. ¿Por qué? Siempre he sostenido que el descontento que se plantea en el espacio en que vivimos es tan importante como lo que tiene que ver con el desempleo.

La izquierda tiende a enfatizar el tema del empleo y devaluar las protestas sobre la calidad de vida.

Pero muchas de las grandes protestas globales que han surgido en los últimos 15 años tienen que ver con la calidad de vida en las ciudades. La política de la vida cotidiana es un área a la que se debe estar muy atento. Mucha explotación ocurre allí. Pregunten a la gente si están satisfechos con cómo funcionan las tarjetas de crédito y las empresas de comunicación que cobran cargos adicionales, una gran cantidad de riqueza se extrae de la vida cotidiana.

- Por lo tanto, ¿el desempleo no es la preocupación dominante?

Sin duda es una preocupación, pero si le preguntas a la gente que tiene empleo, sienten que está haciendo un trabajo de relleno, con poco sentido. No sólo hay una gran cantidad de personas que no tienen ingresos por el trabajo, también una gran parte que vive una existencia sin mucho sentido en relación al trabajo que hace. Se han realizado estudios recientes en los EE.UU., preguntando a la gente si estaban satisfechos con su trabajo y el 70% dijo que lo odiaban o le era indiferente. Hay un problema más grande que el desempleo, y los políticos ponen demasiado énfasis en la idea de empleo, empleo, empleo, en lugar de preguntar ¿qué tipo de trabajo? Se requieren trabajos en los que las personas sientan que están contribuyendo a la sociedad, y del que estén orgullosos.

- Se habla ahora mucho del espíritu empresarial, que la gente cree sus propios puestos de trabajo, nuevas empresas por todos lados. ¿Cómo ves esto?

Hay maravillosas historias de personas que se han convertido en empresarios brillantes, pero hay muchos que han intentado y han fracasado. Aun cuando los resultados implican inmensa auto-explotación. Hay cálculos sobre la cantidad de trabajo que se hace colectivamente en Internet y les pagan menos de dos dólares la hora. Y sólo se cuentan los casos de éxito que aparecen en los periódicos. ¿Cuántas personas fracasan? ¿Cuántas hacen el trabajo del que otros se apropian? Las organizaciones como Google o Amazon son grandes en apropiarse del trabajo de otros.

- ¿Qué valor tiene hoy el trabajo en comparación con otros períodos históricos?

Solía enseñar Marx, cuando había un mundo socialdemócrata que nos rodeaba, y no tenía mucho sentido. Pero trata de leer ahora el Libro I de ‘El Capital’ y verás que es exactamente lo que está sucediendo.

Leer a Marx hoy tiene sentido. En cierto modo, estamos volviendo a las condiciones de trabajo del siglo XIX, que es a lo que apunta el proyecto neoliberal: reducir el poder de los trabajadores y ponerlos en una posición en la que no sean capaces de resistir los procesos de explotación masiva.

Luego está el desarrollo de tecnologías que hacen del trabajo cada vez más redundante. En Baltimore, en 1969, había 37.000 personas que trabajan en la industria del acero. En 1990, la industria producía la misma cantidad de acero con 5.000 personas. Esta ha sido una característica de los últimos 30, 40 años. Mucho trabajo se ha vuelto redundante por primera vez en la industria manufacturera y ahora también en el sector de servicios. Cada vez más, como consumidor, soy yo el que hago el trabajo. Soy explotado en el consumo. Terminamos en una masa de personas sin medios de producción y que va haciendo pequeños trabajos aquí y allá.

- La teoría de la destrucción creativa -en parte, por cierto, el pensamiento de Marx- dice que cada avance tecnológico importante se destruye muchos puestos de trabajo y tipos de trabajo, y emergen otros nuevos. ¿No ocurrirá ahora lo mismo?

Rápidamente un trabajo de ser una tarea que requiere una cierta calificación pasa a ser algo que cualquiera puede hacer. Hace 20 años, los programadores de computadoras eran muy hábiles, ahora todo el mundo sabe cómo crear un sitio web. Surge la necesidad de trabajo especializado que se descalifica casi al instante. Al capital no le gusta que el trabajo tenga algún poder de monopolio en el mercado, por eso se asegura que una gran masa desarrolle estas habilidades rápidamente. Los programadores informáticos ya no reciben salarios como los de hace veinte años. Y esto sucede en todas las áreas.

Y se da además otro paso importante con la evolución de la inteligencia artificial.

La inteligencia artificial conducirá a una transformación radical del sector de servicios. Del mismo modo que vemos la desindustrialización por los cambios tecnológicos en los años 70 y 80, veremos el equivalente en el sector de los servicios en los próximos años.

- Estás hablando de altos niveles de desempleo…

Sí. Y esto nos lleva a un tema que plantean algunos en Silicon Valley: si sucede eso, ¿cómo se va a alimentar el consumo en el mercado? De ahí que este sector, y también en la izquierda, se haya comenzado a discutir la cuestión de la renta básica. Porque si no hay tal estrategia…

-… No podemos ser consumidores

Exactamente. Hay que darle a la gente medios para que pueda seguir consumiendo y que el sistema se mantenga.

- ¿Crees en un escenario en el que no necesitemos trabajar, y sólo tengamos que consumir?

Es posible, ya tenemos una cierta experiencia en este sentido, como el “Bolsa Familia” en Brasil, que da a la gente un ingreso mínimo. Es una redistribución del ingreso que permite que el mercado siga funcionando y que está condicionado a cosas como mandar a sus hijos a la escuela.

- Enviar a sus hijos a la escuela para que puedan tener un trabajo cuando no hay trabajo…

Exactamente. Pero tenemos que pensar que la educación deberá centrarse más en que las personas adquieran conocimientos para desarrollar diferentes actividades que las satisfagan. Hay un crecimiento considerable en el mundo de la cultura, con la gente haciendo actividades culturales en las que no ganan mucho dinero, sino diversión. Y hay trabajo voluntario para hacer, porque esas necesidades existen, incluso siendo tareas no remuneradas. En la industria del cuidado, por ejemplo. Las familias abandonan el cuidado de la gente de tercera edad a menos que haya una retribución para los que lo hacen. Hay mecanismos de este tipo, algunos que funcionan bien, pero no resuelven el problema macro, que es la dinámica del cambio tecnológico basada en convertir la mano de obra en cada vez más redundante, en un momento en que hay cada vez más fuerza de trabajo. Antes de los años 80, China no era parte de la fuerza de trabajo, así como todo el antiguo bloque soviético. Además, está el crecimiento de la población, hay muchas más personas disponibles para trabajar, y al mismo tiempo la dinámica de la transformación capitalista tiene por finalidad ahorrar trabajo.

- ¿Cómo podemos pagar ese ingreso mínimo para toda la población?

Veamos lo que sucedió durante la crisis financiera de 2007/2008. Las autoridades dijeron básicamente esto: tenemos que salvar al sistema bancario y financiero. Los bancos centrales les adelantaron gran cantidad de dinero – la flexibilización cuantitativa – y este dinero se dirigió al mercado de valores, lo levantó, dio buenos rendimientos a las clases más altas. Ahora, podría haber hecho lo mismo pero que se beneficiase a las clases más bajas, apoyando el derecho del pueblo a tener un hogar. Y todas estas propiedades que estaban en manos de los bancos podrían estar en las de las personas que las necesitan. Con la crisis, las clases altas en los EE.UU. aumentaron sus ingresos en un 12%. Estos 12% debería haber ido a las clases más bajas. Hubo una clara opción, se podría salvar a los bancos y hacer que las personas perdiesen sus hogares, o darles el dinero y evitar que se diese la crisis bancaria, porque las personas pagarían los préstamos. Pero si en el momento en que dijésemos esto, ellos dirían “esto es ridículo”, y no lo verían como una opción.

- Esta es una decisión política. ¿No deberían los políticos tomar en cuenta a la gran masa de los votantes?

Depende del país. En los EE.UU. tenemos la corrupción generalizada del proceso electoral. No hay control sobre la capacidad de los ricos de comprar elecciones. Al principio de la campaña republicana este año, 136 familias fueron las principales contribuyentes a los candidatos. Hubo una fotografía en The New York Times en la que veían los hogares de seis de estas familias en la misma zona. Hay que sacar el dinero de los procesos electorales y garantizar el libre acceso a la televisión. La prensa es otro problema: es un medio capitalista, por lo que muchas de las decisiones políticas se nos presenta en una forma distorsionada.

- Pero el poder que tenemos como consumidores, ¿no es muy grande?

Hay algunos grupos que lo utilizan. Hay algunos ejemplos en Internet, hemos visto que en la campaña Bernie Sanders en EE.UU., por ejemplo. El gran problema es cómo convertirlo en un movimiento social que se mantenga unido.

- Cuando se trata de salvar a los bancos, el argumento es que son esenciales para el funcionamiento de la economía.

No estoy diciendo que hay que dejar caer a los bancos, pero si hubiéramos estado tratando con la crisis en el mercado inmobiliario de otro modo, los bancos tampoco irían a la quiebra. Se guardaron a sí mismos, sin salvar a nadie. Sólo digo que hay otras opciones.

- ¿Hubo cambios significativos en relación con el control del sistema financiero después del estallido de la crisis?

Esto sería algo extraordinario en el capitalismo. Siempre pensamos que un capitalismo justo y razonable es posible, pero hay que ver la cantidad de ilegalidades y robos que suceden. Ellos deben ser controlados, y allí es donde el Estado entra, pero es muy difícil de controlar muchas de estas cosas como vimos con los documentos de Panamá. Lo que es extraordinario es que estamos hablando de personas inmensamente ricas que podrían pagar impuestos, pero que se toman una gran cantidad de trabajo para no pagar nada. Ellos pusieron el dinero en Panamá o las Islas Caimán para evitar el pago de impuestos. La idea de que el capitalismo puede ser desarrollado con honestidad… en un momento nos preguntamos si esto es posible.

- ¿Esto es en gran parte debido a la globalización ha hecho que sea posible llevar las cosas a otro nivel?

¿Cuál es la forma de capital que puede ser más movido fácilmente? Se puede mover una unidad de producción, pero todo el mundo verá que cambiar dinero de un lugar a otro es lo fácil. Se hace un montón de dinero con estas manipulaciones financieras. Era necesario resolver el problema de los paraísos fiscales, pero ocultar el dinero es un arte que ya existía en la clase capitalista en el siglo XIX.

- ¿No ves, entonces, posibilidad de un capitalismo más ético?

Hoy en día existe mucha literatura sobre el capitalismo ético y responsable. No digo que todos los capitalistas son piratas, hay por supuesto personas que se preocupan y que quieren crear un capitalismo con ética. Lo que les puedo decir es: tengo muchas dudas, pero me alegro de que haya personas que quieren probar “buena suerte, espero que tengas éxito, avísame cuando lo logres”.

Las reglas para controlar el sistema tendrían que ser integrales y aplicadas por todos, lo cual es difícil. No es imposible. La mayor parte de la deuda es en dólares, y, como hemos visto, en el caso de la quiebra de la Argentina las negociaciones terminaron en los tribunales de Nueva York, debido a que el contrato era en dólares. En los años 90, cuando se argumentaba que había que seguir la pista del dinero, nos dijeron que era imposible. Después del 11 de septiembre se empezó a investigar y se ha demostrado que se puede hacer. La pregunta es cómo van a utilizar esta información.

- Si no crees en el capitalismo “con rostro humano”, ¿qué abogas como sistema alternativo?

Los cambios revolucionarios no suceden de la noche a la mañana, pero hay muchos que creen que algo mejor es posible. Si vas a China, verás que ocurrió una transformación revolucionaria y todo el mundo es optimista acerca de la idea de que se puede cambiar el mundo y hacerlo muy rápidamente.

Por otro lado, soy lo suficientemente viejo para recordar al mundo antes del neoliberalismo, era un mundo muy diferente, las relaciones sociales existentes, e instituciones en que las que las personas confían o no. Mucho de esto se ha terminado. Hubo una revolución, o más bien una contrarrevolución, que nos llevó de la socialdemocracia a esta política de austeridad de derecha.

- ¿Estás hablando de los 50, 60?

Sí, los 70 y 80 fueron el punto de inflexión. Estos grandes cambios ocurren. Esta es una historia que no ha sido bien contada. La clase capitalista estaba hasta ese momento bastante desorganizada, y se organizó en los años 80, el nivel ideológico y de estrategia. La izquierda ha fallado por varias razones, en parte por la represión sobre muchos de sus movimientos, pero también por tener ideas equivocadas sobre cómo podría funcionar una economía alternativa. Por desgracia, el modelo soviético no es un buen modelo, el chino se convirtió varias veces en un desastre, por lo que la izquierda quedó muy confundida acerca de qué tipo de modelo alternativo podría ser creado. Esto permitió que el neoliberalismo ganase espacio. Hoy en día hay experimentos en marcha en torno a una economía solidaria, o formas colectivas de propiedad, o formas alternativas de gobierno y los sistemas monetarios. No sabemos qué va a resultar de ellas al pasar a una escala mayor, debido a que muchas de estas experiencias son apenas locales. Sin embargo, hay una forma sencilla de empezar a pensar en estas cosas. En mi tiempo, la educación superior era gratuita. Desde entonces se ha convertido cada vez más en un commoditie. Bernie Sanders vino a defender un sistema de educación superior gratuita. No hay ninguna razón para no hacerlo. Se acabaría con las enormes deudas que tienen los estudiantes. Y muchos piensan ahora, “eso no es una mala idea”. No parece molestarles que eso sea socialismo, si tiene sentido para ellos. Debe haber un sistema de salud para todos y terminar con esta tontería de las compañías de seguros, que pierden su tiempo y el nuestro en un trabajo inútil como es el de buscar como negarnos nuestros derechos.

- Hablas de socialismo y marxismo, pero para mucha gente son palabras estrechamente asociadas con regímenes represivos sin libertad política…

Las personas pueden preferir ser libre sin acceso a la salud. Marx siempre hablaba de la libertad: los trabajadores son libres en un doble sentido, para hacer un contrato con quien quieran, y también libres de cualquier acceso a los medios de producción. Tienen que comprarlos. Si usted no es capaz de comprar, pasa hambre. Sí, hay un intercambio. Hay un sistema de completa libertad. Un sistema libre siempre se basa en un porcentaje de falta de libertad. La libertad es a menudo un contexto de ciertos tipos de dominación.

26 de julio: Un día para todos los asaltos


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Por Osviel Castro Medel

El 26 debe verse como una marca para mirar en dos dimensiones: al pasado y al futuro, como una luz para quitarnos lunares y seguir edificando una patria más plena


No deberíamos nunca celebrar las fechas sin un análisis consciente de su significado. Es decir, sin evaluar cuánto pesan o no en nuestra vida.

A veces, por ejemplo, festejamos un cumpleaños como un rito y la montaña de la celebración nos hace pasar por alto el valor del onomástico, su simbolismo para el pasado y el porvenir. En otras palabras, puede que la esencia de ese día se nos esfume.

Estos razonamientos nacen espoleados ahora por la llegada de otro 26 de Julio, fecha cumbre de la nación.

Pienso que debemos profundizar más en la equivalencia de las frases derivadas de la conmemoración. Aquel «Siempre es 26», acuñado con tino hace mucho, debe ser en todo tiempo superación de metas, realizaciones concretas, recordación de héroes, filosofía y mensaje de convocatoria perenne.

Y «Victoria de las ideas» debe ser una plataforma para reafirmar conceptos, revisar nuestra filosofía y detenernos, aunque sea por un instante, en las ideas que condujeron al Moncada y su vigencia para tiempos posteriores.

Este 26 tiene una impronta demasiado especial como para dejarla pasar por alto. En 1953, al líder principal de las acciones de Santiago y Bayamo le faltaban 18 días para cumplir apenas 27 años, y hoy, después de tantos sacrificios y de habernos legado su ejemplo extraordinario, está a las puertas de los 90, edad privilegiada en cualquier latitud del mundo.

¡Han pasado más de seis décadas! 

Por eso, celebrar este nuevo aniversario del asalto al Moncada y al Carlos Manuel de Céspedes con Fidel vivo, no solo biológicamente sino también espiritualmente en las entrañas del pueblo, resulta un hecho trascendente en la historia de todas las eras; el mismo Fidel que, guiando a sus compañeros de lucha, ayudó a refrescar y oxigenar las ideas de José Martí, relegadas durante tanto tiempo en la «República» nacida en 1902.

Este 26 no podemos obviar que ese eterno joven encabezó la Generación que tomó los fusiles para reformar radicalmente a una nación de 5,8 millones de habitantes con 807 700 analfabetos (más del 22 por ciento de la población), un desempleo del 8,4 por ciento de la masa económicamente activa, un porcentaje de bohíos de 33,3 y de electrificación de solo 55,6.

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Eso, sin hablar, como señaló él mismo en su brillante alegato de autodefensa, conocido como La historia me absolverá, el 16 de octubre de 1953, de los 500.000 obreros del campo que trabajaban solo cuatro meses, los «400.000 obreros industriales y braceros cuyos retiros están desfalcados», los 10.000 profesionales «en un callejón sin salida», las 200.000 familias campesinas sin «una vara de tierra donde sembrar alimentos para sus hambrientos hijos…».

Claro, no podemos emparentar el 26 de Julio y la figura de Fidel solo con el cambio social necesario en la Cuba de entonces, algo que de por sí es sumamente extraordinario. Hemos de ver la fecha y a su protagonista más excelso ligados, también, al renacer de la ética, la moral y la virtud, preceptos defendidos por Martí hasta el día final de su existencia fecunda de 42 años. Si no lo hacemos, cometeríamos el error de ver al Moncada con menos influjo del que tuvo y tiene.

Con su sabiduría excepcional ha escrito al respecto Armando Hart: «En los años 50 existía un vacío ético en la superficie política de aquella sociedad y la acción insurreccional del 26 de Julio comenzó a producir gradualmente un ascenso moral y cultural de vasto alcance social en ese medio».

Tenemos que ver el 26 unido, indiscutiblemente, a las ideas, una palabra jamás abstracta, identificada con la conciencia social. Cuando el teniente del Ejército Pedro Sarría, precisamente para proteger a su prisionero Fidel y dos compañeros de este, dijo que las ideas no se mataban estaba dando, sin pretenderlo, una lección filosófica en la que todos deberíamos beber hoy.

Pero el 26 también ha de mirarse como marca para asaltar los males que impiden el crecimiento de la nación y entorpecen su proyecto social, «cambiar todo lo que deba ser cambiado» y trazarnos metas audaces, aunque factibles.

Pruebas y hechos de una generación martiana

Ahora que traemos el 26 a estas páginas, con toda esa carga de significados e incentivos, debe subrayarse que las generaciones más jóvenes tienen, entre sus desafíos, que aprender a demostrar que aquella generación no fue martiana por decreto o autoproclamación, sino por pruebas y hechos.

Como también es menester que los pinos nuevos entiendan que la Generación del Centenario no se restringió al grupo de asaltantes arriesgados de Bayamo y Santiago, quienes representaban la indiscutida vanguardia de una hornada más numerosa.

La generación del 68, en el siglo XIX, no la integraron solo Céspedes, Agramonte, Gómez, Calixto y Maceo; y este punto de vista es extensivo a los que vivificaron a Martí en el año 53 del siglo XX.

Los jóvenes necesitan estudiar más a Eduardo Chibás y a su «Vergüenza contra dinero», fuente de inspiración para muchos de la Ortodoxia y de otras tendencias políticas similares; él hablaba constantemente de la regeneración moral de la República y, tal como señala Elena Álvarez en su libro Clarinada fecunda, citaba de modo frecuente a Martí.

Chibás también estaba convencido del papel de la ética como arma de combate contra los males de un país calamitoso y arruinado, una ética que no se remontaba solo al Maestro sino, también, a sus predecesores y sucesores patrióticos.

Una prueba de que Fidel siguió ese legado se encuentra en su respuesta al asalto a los estudios del escultor Manuel Fidalgo, una acción ejecutada por personeros del régimen de Batista, quienes destruyeron las mascarillas de Eduardo Chibás y José Martí, con el pretexto de que en su base tenían el exergo: «Para Cuba que sufre».

A ese hecho bochornoso replicó el joven abogado, el 5 de febrero de 1953 en la revista Bohemia: «De este modo la obra entera de Martí habrá que suprimirla, arrancarla de las librerías y bibliotecas porque toda ella, pletórica de amor a la patria y al decoro humano, es una perenne acusación a los hombres que hoy gobiernan contra su voluntad soberana al pueblo de Cuba».

Pero, por encima de esa influencia, que pudiéramos llamar teórica, está la de la práctica, pues la casi inmolación de Martí en los campos de Dos Ríos constituyó un modelo para aquellos que se dispusieron a dar la vida después de vender su puesto de trabajo, su estudio fotográfico, su laboratorio…

Casi todos sabían que podían perder la vida en las acciones combativas, mas si eso ocurría se convertirían en clarinadas para un pueblo necesitado de volcanes después del violento zarpazo del 10 de marzo de 1952.

Cintio Vitier, en conferencia ofrecida en la Universidad de La Habana en 2006, supo definir el peso de ese ejemplo martiano, de doctrinas y hechos, cuando sentenció que «en el ideario y la ejecutoria de Martí, exponente cimero de la tradición revolucionaria cubana, se halla el fundamento histórico y moral de la Revolución que triunfó en 1959».

Sin callar verdades

Debemos ver el 26 a la luz de estos tiempos, lo que no equivale en modo alguno a una nueva interpretación de su significado. Siempre supondrá cambio, avance, revisión, valentía para hacer, mejoramiento… Pero esos términos no pueden asumirse de la misma forma en épocas de actualización económica que en las de la llamada ofensiva revolucionaria de los años 60.

Ahora mismo, por ejemplo, la fecha ha de estar ligada al mil veces mencionado cambio de mentalidad, a métodos nuevos, a la lucha contra otro tipo de corrupción, a la batalla contra las indisciplinas sociales o el burocratismo.

Y es innegable que precisamos continuar llenándonos de Moncadas para superar tendencias nocivas y mejorar, incluso, aspectos que calificamos de positivos.

En esa cuerda de pensamiento, vale mencionar de nuevo a Cintio Vitier, quien expuso que Cuba, aun con las altas cotas educativas logradas, aun cuando «echó a andar la reforma integral de nuestra enseñanza, cuya primera gran victoria fue la campaña de alfabetización», necesita seguir mejorando su educación, que no es solo la «que se imparte en las aulas sino también la que se manifiesta, y vive en las calles y los campos de la patria».

La nación requiere multiplicar el 26 en su día a día para ganarle la partida a la «incultura en las formas de vivir», enraizada en no pocos, como nos advirtió Vitier, porque «un pueblo de costumbres incultas no puede ser en verdad, martianamente hablando, un pueblo libre». Necesitamos el espíritu de la fecha para mantener nuestra apuesta por la igualdad, la preservación de los derechos y el culto a la dignidad humana. Para percatarnos de que a pesar de todas las victorias en diferentes ámbitos, es posible conquistar más cuotas de justicia social, participación ciudadana, bienestar y felicidad.

Ese 26, con el torrente de sus ideas, en el que resulta clave Martí, es importantísimo para ayudarnos a lanzar la honda contra los monstruos de adentro y de afuera, censurarnos errores, demostrarnos que es útil el diálogo, para que se cumplan sueños pretéritos y para seguir edificando una patria más plena.

Venezuela: Donde crece la resistencia chavista


RevP 5

Por Marco Teruggi

Algo del país por venir, ya llegó. En varios tiempos simultáneos: la revancha al chavismo, los territorios liberados, la huida burocrática. Todos tienen elementos en desarrollo, hacen a una Venezuela que casi no se parece a la del 2012. De estos tres el más visible es el primero: basta abrir el periódico y ver los cuadros medios y bajos chavistas que son asesinados periódicamente. En esa lista se encuentran nombres conocidos -el diputado Robert Serra, el periodista Ricardo Durán- pero sobre todo centenas de militantes populares desconocidos para la opinión pública. Es una ola que viene de frente y entra en cada vez más casas.

El segundo elemento siempre ha sido el más invisible/invisibilizado. Se trata del proyecto estratégico desarrollado por Hugo Chávez, y es donde se encuentran respuestas tanto para este presente, como para proyectar un futuro escenario de resistencia total. Al país por venir (ese que nadie desea pero puede ocurrir) hay que anticipársele.

En las comunas -máxima expresión de territorio liberado ya se piensa en esos tiempos.

No en todas claro, son heterogéneas, y más de 1500 ya registradas en todo el país. Algunas crecieron silvestres -con Aló Presidentes- otras con una fuerte impronta de la institución, y también acompañadas por movimientos sociales. Llevan varios años de acumulación, ensayos de coordinación, resistencia a la burocracia y a la guerra -en el 2013 por ejemplo- fueron asesinados más de diez comuneros en el estado Lara. Eso las convierte en espacios políticos donde se proyecta con mayor facilidad lo que podría estar por venir y, en parte, ya está acá.

Por eso es necesario buscar claves ahí. Un ahí que puede ser en barrios de Caracas, las costas de Sucre y Falcón, o los estados llaneros, conformado por el sujeto-potencia de la revolución: los humildes. Chávez lo dijo desde un principio: para resolver el problema de la pobreza hay que darles poder a los pobres.

Poder, una gran disputa de poder, de eso se tratan las revoluciones, las comunas.

La revolución en progreso

Lo primero al entrar a un territorio liberado es saber que lo principal, a veces, es lo invisible a primera vista. Como la misma ruta, por ejemplo.

-Compadre esta vía la construyó la comuna, aquí antes se venía a burro, era un barrial.

La comuna se llama Revolución en Progreso. Está en el municipio Biruaca, estado Apure. El paisaje es característico del llano: horizonte verde, árboles altos con copas que abarcan el ancho de varias casas, pájaros en cercas y redes eléctricas, racimos de ganado pastando, caminando en los esteros, casas en las orillas del camino, barrio adentro, rosas, amarillas, azules, violetas. Casas que como la carretera son un logro comunal: se construyeron 110 en este territorio. Todas con brigadas de trabajo voluntario.

El centro operacional es la Empresa de Propiedad Social Directa La Bendición de Dios, enteramente manejada por la comuna. Ahí están los cuatro camiones que administran, el centro almacenamiento de insumos para la siembra del maíz, y una laguna de cría de cachamas. Murales: Bolívar, Zamora, Chávez, Maduro, el Che.

Es sábado, día en que matan una vaca para vendérsela a la comunidad a precio justo.

Eso es lo primero hoy: el alimento. El problema que corroe el proceso, su base social. Por eso idearon varias estrategias, una de ellas la vaca semanal -2 mil bolívares el kilo de carne contra 3 mil en promedio nacional- y otra, también cada sábado, un mercado junto a las 13 comunas del municipio. Ahí venden huevos, cochinos, naranjas, caraotas, ají, topocho, todo lo que dan esas tierras fértiles. Así desarrollan espacios de venta sin intermediarios privados -cáncer del campesinado- y abaratan los costos de vida de una población, golpeada por el desabastecimiento y la subida de precios.

La certeza es que una comuna que no sea productiva difícilmente puede sostenerse. Y, se sabe, la autonomía económica es imprescindible para lograr la autonomía política, pedida por Chávez. En el país que podría estar por venir, que ya está en partes acá, no existirá más apoyo estatal: será necesario ser lo más autosustentables posible.

No es del todo nuevo para muchas comunas: la burocracia sabotea y el privado asfixia.

¿Cuál burocracia? La que controla por ejemplo Agropatria, institución que debería vender los insumos a precio justo. En este caso a la comuna, que se encarga de administrarlos. Este año llegaron cuatro meses tarde: para el campo, el ciclo de invierno y verano llanero, es demasiado tiempo. Y la venta: el acuerdo al recibir un crédito estatal es que luego se le debe vender la producción al mismo Estado. El problema es que pueden tardar más de un año en pagar. Con el aumento de precios -2357,90% de inflación en el 2015 según el Banco Central de Venezuela- es en los hechos un saboteo a la producción.

-Aquí nos está matando la burocracia, nosotros vemos políticas que están bien, pero en la realidad es otra cosa. Y la gente está dispuesta a trabajar y luchar por este camino. Alexis Arcaona es vocero comunal.

Tienen experiencia en crear respuestas colectivas, unirse ante los problemas. Es la forma radical de hacer la democracia -antítesis del sálvese quien pueda- inducido por la guerra y la cultura del capital. Han conformado y consolidado los órganos de autogobierno, y su autonomía política es uno de los mayores logros. El alcalde, por ejemplo, debe consultar al parlamento comunal para ejecutar un proyecto en el ámbito de la comuna

-Somos Gobierno y nos creemos Gobierno.

La crudeza comunal

Las comunas se abren paso entre la revancha creciente y su complicidad burocrática, quienes huyen del proyecto llevándose lo que pueden. Cuentan con apoyos cambiantes de pocas instituciones. Por esas condiciones cargan escenarios del hipotético por venir en sus prácticas. Por eso ponen el esfuerzo en la producción y la democracia protagónica. Saben que ahí están las claves primeras.

Producción, comida y libertad, podrían ser las consignas.

La radicalidad que cargan tiene que ver con el sujeto que las conforma -viene, por ejemplo en Apure, de largos tiempos de sometimiento y pobreza- y de la misma realidad que empujan. Palabras como guerra y burocracia no son reflexiones teóricas hechas desde un escritorio: matan, desaparecen, sabotean esfuerzos colectivos, destruyen siembras. Son marcas en el cuerpo. Representan, en la práctica concreta, el enemigo.

Las comunas son subestimadas muchas veces: por desconocimiento o temor. Lo segundo en el caso de quienes se oponen a su desarrollo porque el mismo está llamado a pedirles transferencias de competencias, poder y recursos, y en lo primero porque es muy poco lo que los medios dicen sobre las comunas.

-Nos ven como pequeños, pero si sumamos somos grandes, y aparte de eso le llega más al pueblo lo del pequeño productor que lo del gran terrateniente. Dice Arcaona.

La producción comunal no se va por contrabando a Colombia, no alimenta redes de bachaqueros, no especula con los precios hasta ahogar a las comunidades, no obliga a las poblaciones a hacer largas horas de cola bajo el sol. Siempre es necesario repetirlo: quién puede dar respuesta a la crisis inducida: ¿el pueblo, la burguesía/oligarquía o la burocracia?

Por eso la pregunta que regresa: ¿por qué la revolución no apuesta a las comunas?

El país que podría venir, que en partes ya llegó, va a seguir matando, intentando llevar a la sociedad al caos. Los infiltrados de dentro van continuar viendo qué robarse en la huida, cómo ser cómplices del plan hambreador. ¿Quién puede decir cómo será el escenario en diciembre? Lo seguro también es que las comunas no van a dar tregua. No están solas: existen fábricas recuperadas, movimientos sociales, partidos aliados, un tejido organizativo en todo el territorio, disperso, pero de pie. Ahí está el país por venir que resiste, disputa el futuro y construye su hora.

Fuente:
Hastaelnocau.wordpress.com

Ayer, hoy y siempre, Madrid con la Revolución cubana

Por José Luis García de Mingo en Cuba Información, y Prensa Latina.



El pasado 26 de Julio, cientos de personas recorrieron el centro de Madrid para festejar un año más el aniversario del asalto al cuartel Moncada (26 de Julio de 1953), en una manifestación festiva y combativa, arropada por música cubana, en la que se escucharon consignas contra el bloqueo de EEUU y en defensa de la Revolución.

Vivas continuas a Fidel, Raúl y el Che, y la reivindicación del carácter socialista del proyecto político de Cuba fueron un continuo clamor.

La contrarrevolución afincada en Madrid no apareció en ningún momento, ni hubo provocaciones. La ultraderecha de origen cubano ha perdido gran parte de la presencia e influencia institucional que tuvo hace años en Madrid.

Terminó la manifestación en la Puerta del Sol, repleta de turistas que miraban algunos con interés, otros con asombro. Varias de esta personas también se sumaron a la concentración final.

Tras leer la lista de convocantes, se paso a la lectura del manifiesto, y finalmente un compañero puertorriqueño explicó el caso del preso boricua Oscar López Rivera y exigió la independencia de Puerto Rico.

Finalizó la manifestación con consignas revolucionarias.



La organización anunció, para el próximo 13 de agosto, actos en festejo del 90 cumpleaños del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

Españoles demandan cese de bloqueo estadounidense contra Cuba

Cientos de españoles marcharon hoy en esta capital para reclamar el cese del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, en ocasión del Día de la Rebeldía Nacional en la isla.

La manifestación fue convocada por más de 20 organizaciones políticas, juveniles y de solidaridad para celebrar el aniversario 63 del asalto al cuartel Moncada, gesta que constituyó el motor impulsor de la Revolución triunfante en la nación antillana el 1 de enero de 1959.

Banderas de Cuba, del Movimiento 26 de julio, de las Juventudes Comunistas del país ibérico y del Partido Comunista de los Pueblos de España sobresalieron en la colorida y pacífica marcha, que se extendió por toda la calle Atocha hasta la emblemática Puerta del Sol.

Cuba es y será ejemplo de dignidad; Viva Cuba, Fidel y el Che; Raúl seguro, al yanqui dale duro o El pueblo lo dice, y tiene razón, viva Cuba socialista y la Revolución, fueron algunas de las consignas enarboladas por los manifestantes, en su mayoría jóvenes.

En un manifiesto leído en la céntrica plaza madrileña, se exaltó la ayuda solidaria del país caribeño con numerosos pueblos del mundo, en particular de África y Latinoamérica, a través de programas educativos y de salud.

A pesar de todas las agresiones y el cerco económico de más de medio siglo impuesto por Estados Unidos mantuvo y profundizo sus políticas sociales y revolucionarias, así como su internacionalismo, que comenzó el mismo 1 de enero de 1959, enfatizó.

Al respecto recordó la reciente lucha contra el ébola en varias naciones africanas, "siendo Cuba el único país que estuvo presente antes de la epidemia y el que aportó mayor ayuda", subrayó.

"La Revolución cubana sigue luchando codo con codo junto a sus hermanos del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), contra las agresiones imperialistas que pusieron su objetivo especialmente en la Venezuela Bolivariana", expresó el texto.

Aunque en los últimos dos años Cuba y Estados Unidos restablecieron relaciones diplomáticas, "no debemos perder de vista que el objetivo del imperialismo sigue siendo el mismo: destruir a la Revolución cubana", advirtió el movimiento de solidaridad español.

Destacó la apuesta constante por la paz de la mayor de las Antillas, y puso de ejemplo las negociaciones que desde 2012 se celebraron en La Habana entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el gobierno colombiano para terminar con el conflicto en ese país sudamericano.

"Cuba transita por la única vía que puede romper definitivamente con la dominación y la explotación de unos seres humanos por otros: el Socialismo", sentenció el manifiesto.