Hace 102 años, 20 de diciembre de 1917, el Presidente del Consejo de Comisarios del Pueblo de la RSFSR V. I. Ulianov (Lenin) firmó un decreto sobre la creación de la Comisión Extraordinaria de toda Rusia para Combatir la Contrarrevolución y el Sabotaje (ВЧК)(Cheká), que estaba dirigida por F. E. Dzerzhinsky.
La Cheká fue el cuerpo de la dictadura del proletariado para la protección de la seguridad del Estado de la RSFSR, el órgano rector en la lucha contra la contrarrevolución en todo el país.
V.I. Lenin llamó a la Comisión Extraordinaria de toda Rusia, sin la cual "el poder de los trabajadores no puede existir hasta que los explotadores existan en el mundo ...", "nuestra arma impactante contra innumerables conspiraciones, innumerables intentos de poder soviético por personas que eran infinitamente más fuertes que nosotros".
Desde el 27 de enero de 1921, las tareas de la Cheká también incluyeron la eliminación de la falta de vivienda y el abandono entre los niños.
En la época soviética, durante muchas décadas, el 20 de diciembre se celebró extraoficialmente como el "Día de la KGB".
LOS KULAKS Y EL CLERO (1918, Rusia)
Por Federico Rubio Herrero
Los Kulaks hicieron cuanto
pudieron para obstaculizar la labor de los comités de campesinos pobres
en Rusia. A la política de abastos del Gobierno Sovietico y a la
organización de campesinos pobres, los kulaks respondían con alzamientos
armados en todo el país. El mayor número de sediciones kulaks tuvo
lugar en el segundo semestre de 1918. "La jauría avida, ahita y feroz de
los kulaks - señaló V. I. Lenin - se ha unido por doquier a los
terratenientes y los capitalistas contra los obreros y los pobres en
general. En todas partes, los kulaks se han ensañado con ferocidad
salvaje en la clase obrera. En todas partes se han aliado con los
capitalistas extranjeros contra los obreros de su pais".
A
la cabeza de los levantamientos de los kulaks, como regla, se
encontraba la oficialidad contrarrevolucionaria. Mediante el engaño, el
atemorizamiento y el chantaje, los kulaks lograron arrastrar más de una
vez a estos motines a la parte vacilante del campesinado. Los kulaks
dirigían su golpe principal contra los emisarios de la clase obrera,
asesinando ferozmente a los obreros y campesinos pobres activistas. En
los últimos días de junio, los kulaks armados atacaron a un grupo de
obreros de Yaransk (provincia de Viatka), llegado al sub distrito de
Serdezh, causándole ocho muertos y 63 heridos graves.
Organizados por
los eseristas de izquierdas, los kulaks se amotinaron el 7 de agosto en
el distrito de Peremishl, de la provincia de Kaluga. Sirvió de pretexto
para ello la llegada a la aldea Troitskoe de una comisión para confiscar
las caballerías. Los kulaks asesinaron a los miembros de la comisión, y
después, los cabecillas del motín distribuyeron por las aldeas de los
contornos una orden exigiendo que todos los campesinos se concentraron,
inmediatamente, e la aldea Troitskoe. Desde este punto, la muchedumbre
de campesinos, engañados por los eseristas de izquierda, se dirigió a
Peremishl y disolvió el Soviet de esta localidad.
Los
alzamientos de kulaks en las provincias de Tver, Riazan, Tambov y en
otras, facilitaron a los intervencionistas su ofensiva contra la
Republica Sovietica.
La
actitud antisovietica del clero fue un arma importante utilizada por los
enemigos del poder soviético en su lucha contra la revolución
socialista. Los popes tomaban parte activa en las acciones
contrarrevolucionaria de los kulaks. Utilizando los prejuicios
religiosos y el espíritu supersticioso de los aldeanos, el clero los
enfrentaba con el poder soviético. Cuando en cierta ocasión se presentó
en el monasterio de Nikolo-Ugreshski el representante del Soviet de
Liubertsi, de la provincia de Moscu, exigiendo que se le entregasen
caballos para atender a las necesidades del Comisariado Militar, el pope
responsable del monasterio le rogó que esperase media hora, aprovechada
para enviar recaderos a las aldeas circundantes diciendo que "los
bolcheviques saqueaban el monasterio y asesinaban a los monjes". Se
congregó una gran muchedumbre que intentó linchar al representante del
Soviet, pudiendo impedirlo a duras penas los campesinos pobres. La
comisión extraordinaria del distrito registró el monasterio encontrando
proclamas antisovieticas y los estatutos de una organización
contrarrevolucionaria.
En
la lucha contra los kulaks, la clase obrera y el campesinado pobre
inmolaron muchos de sus mejores hijos. Desde julio de 1918, es decir,
desde el momento en que se sublevaron los eseristas de izquierda, hasta
diciembre, según datos incompletos, los kulaks asesinaron cerca de
23.000 funcionarios soviéticos. Además, desde mediados de junio hasta
diciembre sucumbieron nas de 7.300 obreros, participantes en la cruzada
por el trigo.
Insignia de la Checa en 1922.
El
proletariado se vio obligado a replicar a los kulaks con medidas
implacables. Todo el que se oponía por las armas al poder soviético era
ejecutado en el acto. El fusilamiento de un explotador salvaba la vida a
decenas y centenares de obreros y campesinos trabajadores.
A
mediados de 1918, habían sido instituida ya 40 comisiones provinciales y
365 distritales extraordinarias. Ellas fueron la espada vengadora que
abatia a los enemigos de la revolucion socialista. Atendiendo al
llamamiento del Partido Comunista, también el campesino medio se alzó en
pos de los campesinos pobres a la lucha contra los kulaks. No existía
en el país ningún rincón donde los trabajadores no se mantuvieran alerta
contra la burguesía y los kulaks, ni donde los intentos de los
explotadores para alzarse contra la revolucion socialista no fuesen
cortados inmediatamente de raíz.
Fuente:
Academia de Ciencias de la URSS. Instituto de Historia.
Gracias amistad hispano sovietica
ResponderEliminarAhora se que la seguridad social la inventaron los soviet.