22 de octubre de 2011

Qué ha hecho la Revolución cubana en más de 50 años


Por Raúl Antonio Capote

Cuando se mencionan los logros de la Revolución, siempre y no sin razón, se habla de la Salud Pública y de la Educación, éxitos emblemáticos del proceso revolucionario cubano, pero ¿es eso lo único destacable en estos más de 50 años? Por supuesto que no. A esos resultados nos referiremos en esta serie de trabajos que comienzan hoy y digo serie porque sería imposible en un solo texto plasmar todo lo que se ha realizado.

RCBaez_Poderdelpueblo.jpg

Liberación, emancipación y democracia

Como en muchos de los países que fueron colonia, en Cuba la lucha por la libertad pasa por la lucha de liberación nacional. El movimiento que se levantó contra la dictadura de Batista se levantó además contra la dependencia del imperialismo estadounidense.

La democracia ejercida en Cuba tiene una fuerte configuración popular, en contraposición a la democracia electoral característica de occidente. Pero lo anterior no impide la realización de elecciones, las cuales refuerzan la legitimidad de esa democracia popular.

En Cuba todas las personas pueden votar y ser votadas cumpliendo los 16 años. La inscripción es universal, automática y gratuita. La base de nuestro sistema institucional son los delegados de circunscripción que se agrupan en consejos populares e integran las asambleas municipales. Los candidatos son propuestos y elegidos por el pueblo en reuniones públicas de las diversas zonas vecinales que componen cada circunscripción electoral, no por partidos de la politiquería. Para cada puesto se proponen como mínimo dos candidatos y ocho como máximo. Para ser electo hay que recibir más del 50% de los votos. No existen campañas electorales. La labor de publicidad es realizada por las comisiones electorales. En sitios públicos es colocada la biografía de los candidatos propuestos por el pueblo en las asambleas de barrio, no hay promesas electoreras y la elección o no, se basa en los méritos personales de la persona. Se garantiza así la imparcialidad y el trato equitativo de todos los candidatos.

El voto es libre, secreto y directo. El colegio electoral se encarga de realizar el escrutinio y desde hace por lo menos tres décadas siempre hay un gran número de ciudadanos cubanos, diplomáticos, periodistas y observadores extranjeros. Aunque el voto es voluntario, desde 1970 a la fecha se ha registrado la participación de más del 90% de la población en edad de votar. Ningún representante, diputado o delegado recibe un beneficio por desempeñar su cargo; el Estado les paga un salario exactamente igual al que tenían en sus trabajos antes de desempeñar su cargo, empleo al que regresaran una vez finalizado su mandato. La rendición de cuentas y el mandato revocatorio son un componente importante del sistema electoral.
Aún así este sistema electoral no agota el contenido democrático de la sociedad cubana, la activa participación ciudadana no se limita a escoger, postular, elegir, controlar y revocar a sus representantes, existe una cultura participativa que va mucho más allá de la participación de los ciudadanos en su sistema representativo, existe una vigorosa sociedad civil.

Una de las características de la sociedad cubana es su fuerte cultura del debate y el diálogo. Por las calles de la Habana, en las plazas públicas, en los parques, pueden encontrarse a grupos de cubanos y cubanas discutiendo sobre varios temas. En las “guaguas” el silencio no existe. La gente interactúa, opina, y si no está de acuerdo, discute, critica. Los tonos verbales llegan a ser muy altos. Un número amplio de cubanos se agrupa en distintas organizaciones de la sociedad civil, como la Federación de Mujeres Cubanas, los Comités de Defensa de la Revolución, etc. Las distintas asociaciones como las de pedagogos, abogados, agricultores, economistas, artistas, minusválidos, y cientos de ellas más, las cuales tienen peso importante en las decisiones del Estado. Esas organizaciones y asociaciones abarcan prácticamente el universo de actividades, intereses y problemas que conciernen a todos los cubanos.

Además desde los primeros años de la Revolución el pueblo se organizó en milicias armadas para defender la patria, las armas las tiene el pueblo integrado hoy a las Unidades de Milicias de Tropas Territoriales, si la Revolución no contara con el apoyo de su pueblo, no duraría un segundo, (hablamos de millones de milicianos, armados y entrenados)

El programa ideológico que se impulsa y defiende desde la tierra de Martí y de Fidel ha integrado en su construcción elementos como la liberación, la democracia, la emancipación y el socialismo, pilares fundamentales en la construcción de un mundo más justo. Estos elementos, junto a la descentralización de la justicia y la administración, marcan una diferencia radical con el socialismo burocrático y los proyectos socialistas fracasados en Europa del Este el pasado siglo.

Haber derrotado al “fatalismo geográfico” que señalaba que en Cuba no podía sobrevivir un gobierno que no contara con el apoyo de los Estados Unidos. Es un logro importantísimo de la Revolución.

Haber derrotado la agresión militar, el terrorismo made in USA y la guerra económica impuesta por el imperio a todo lo largo y ancho del mundo y en todas las esferas de la economía y las finanzas es un logro.

La sobrevivencia ante el derrumbe económico de 1989-1993 cuando Cuba en medio de una feroz e intensificada guerra económica perdió sus principales mercados y fuentes de materias primas.

La dedicación al trabajo de los cubanos durante el catastrófico declive del salario real y los ingresos después de 1990. Impresiona el profesionalismo de muchos cubanos que durante año, desde 1990, ante el enorme deterioro del poder adquisitivo de sus ingresos, continuaron trabajando con seriedad y dedicación en la medicina, universidades, escuelas, el servicio público, u otros empleos. El trabajo abnegado de innumerables ciudadanos durante los años difíciles del Período Especial, 1990-2010, es en esencia lo que ha permitido la recuperación desde la profunda depresión de 1993.

Son importantes logros de la Revolución cubana, pero hay muchos más a los que nos referiremos en posteriores trabajos, pero:

Nuestro sistema democrático es el más importante logro de la Revolución, lo primero que habría que subrayar no fue copia de nadie, sino hubiera seguido el camino del modelo de Europa Oriental, pero el cubano perdura, vive y se desarrolla en un mundo sin campo socialista y bajo la hegemonía estadounidense. El modelo democrático cubano nace como evolución necesaria de su propia historia

II

Logros de la Revolución II: La Voluntad Hidráulica

La situación encontrada en 1959 era realmente desastrosa: de los 300 asentamientos con más de 1 000 habitantes existentes en el país, sólo 114 contaban con suministro de agua por acueducto y 12 con alcantarillado. Funcionaban 16 instalaciones de cloración y de 4 plantas potabilizadoras (Camagüey, Santa Clara, Palma Soriano y Cienfuegos) una no funcionaba hacía 3 años, por no disponer de productos químicos y otra requería ser reparada.

A su vez, el alcantarillado de la capital, La Habana, que contaba con casi 50 años de construido, resultaba insuficiente y necesitaba una urgente reconstrucción. La única planta de depuración de aguas residuales, enclavada en Santa Clara, se encontraba abandonada, y los alcantarillados de Holguín, Guantánamo y Pinar del Río, que llevaban varios años en construcción, no habían comenzado a dar servicio.
En cuanto a la capacidad de almacenamiento de agua, sólo existían 13 pequeños embalses, distribuidos en las provincias de Camagüey, Villa Clara, Holguín y Santiago de Cuba.
En las condiciones de subdesarrollo económico que confrontaba Cuba al triunfo de la Revolución en 1959, los recursos hidráulicos, a pesar de su innegable importancia para el progreso humano, no corrían mejor suerte que el resto de su riqueza natural, sometida al saqueo y la explotación rapaz neocolonialista de la economía cubana.
Así surge, impulsada por Fidel Castro, la voluntad de desarrollar los recursos hidráulicos y dar el lugar que le corresponde a la hidráulica en la vida social y económica de Cuba.
El Gobierno Revolucionario, en virtud de la promulgación de su Ley No. 1049 del 10 de agosto de 1962, crea el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos.
Las siguientes cifras demuestran lo alcanzado (datos 2006):
Infraestructura hidráulica
• 239 embalses administrados por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, que almacenan en su conjunto 8774,32 hm3. El mayor número de embalses se concentra en la provincia de Camagüey con 53, mientras Sancti Spíritus dispone de la mayor capacidad con 1273,18 hm3.
• 61 derivadoras
• 730 micropresas
• 759 km de canales magistrales
• 8 estaciones de bombeo de trasvase
• 1401 km de diques de protección

Hidroenergía
• 179 instalaciones (pequeñas, mini y micro centrales), ubicadas en 9 provincias y 38 municipios. Del total, 153 prestan servicio en zonas montañosas y de difícil acceso a más de 33 mil habitantes. La potencia instalada es de 17,78 MW y se producen anualmente alrededor de 30 000 MW/h, entregándose al Sistema Eléctrico Nacional el 90 %.
Abastecimiento de agua y saneamiento

• 95 % de la población con cobertura de abasto de agua potable
• 94 % de la población con cobertura de saneamiento por diferentes vías
• 2737 lugares con acueductos (834 sector urbano y 1903 rural)
• 562 lugares con alcantarillados
• 59 plantas potabilizadoras
• 8 plantas depuradoras
• 302 sistemas de lagunas
• 470 tanques sépticos
• 862121 fosas sépticas
• 19742 km de tuberías de acueductos
• 4703 km de tuberías de alcantarillado
Toda esta infra estructura hidráulica ha permitido que de un potencial hidráulico total del país de 38,1 km3 anuales, 6,4 km3 de fuentes subterráneas y 31,7 km3 de fuentes superficiales, sean aprovechados 23,9 km3 anuales, de los cuales 16,4 km3 pertenecen a aguas reguladas, 1,5 km3 a aguas no reguladas y 6,0 km3 a aguas subterráneas.

En la actualidad se acometen obras de gran impacto en esta importante área de la vida y la economía cubana, como el acueducto de Santiago de Cuba, cientos de derivadoras y trasvases de agua, una cuantiosa inversión para solucionar el problemas de las pérdidas de agua en las conductoras y un basto programa educativo para intensificar el ahorro del preciado líquido, lo que permitirá al país enfrentar la terrible sequía que azota a la isla desde hace varios años y enfrentar las nuevas inversiones y proyecto de crecimiento económico planificado para los próximos años.

III

La enseñanza artística, otro gran logro de la Revolución.


La fundación de la Escuela Nacional de Arte en 1962 dio inicio a la extraordinaria expansión de la enseñanza artística, como una de las obras más trascendentales y hermosas de la Revolución Cubana expresada en el desarrollo y prestigio alcanzado por el arte en Cuba.
En marzo de 1962, a partir de un estudio general sobre la enseñanza artística, se ve la posibilidad de crear un centro multidisciplinario donde se encontraran las artes y donde hubiera una vinculación entre los alumnos de todas las ramas artísticas. Así se crea la Escuela Nacional de Arte (ENA). En la misma se constituirían cuatro especialidades: Ballet, Música, Arte Dramático y Artes Plásticas. Tres años después, en 1965 comenzaría la enseñanza de la Danza Moderna y Folclórica.
Se creó un complejo artístico docente, que se ramificó en 47 escuelas (24 de nivel elemental y 23 de nivel medio) a todo lo largo del país. Ello dio lugar a la construcción de un programa de Escuelas Vocacionales de Arte que dotaría a cada provincia, de una institución especializada para cursar estudios elementales de música, ballet, danza y artes plásticas; así como la definición de la ubicación de las Escuelas Profesionales de Arte, que debían construirse en el país.
Nivel Elemental
Pinar del Río: Escuela Vocacional de Arte Raúl Sánchez (Música-Ballet-Danza) La Habana: Escuela Vocacional de Arte Juan P. Duarte (Música-Danza) Ciudad de La Habana :Escuela Elemental de Arte Alejandro García Caturla (Música). Escuela Elemental de Arte Manuel Saumell (Música). Escuela Elemental de Arte Guillermo Tomás (Música) .Escuela Elemental de Arte Paulita Concepción (Música-Danza) Escuela Elemental de Arte Alejo Carpentier (Ballet) Matanzas Escuela Vocacional de Arte Alfonso Pérez (Música-Ballet-Danza)
Cienfuegos Escuela Elemental de Arte Manuel Saumell (Música-Danza), Villa Clara Escuela Vocacional de Arte Olga Alonso (Música-Ballet-Danza), Sancti Spíritus Escuela Elemental Música Ernesto Lecuona, Ciego de Ávila Escuela Vocacional de Arte Ñola Sahig (Música-Danza), Camagüey Escuela Vocacional de Arte Luis Casas Romero (Música-Ballet-Danza), Las Tunas Escuela Vocacional de Arte El Cucalambé (Música-Danza), Holguín Escuela Vocacional de Arte Raúl Gómez García (Música-Ballet-Danza), Granma Escuela Elemental de Música y Danza Manuel Muñoz Escuela Elemental de Música Manuel Navarro Luna, Santiago de Cuba Escuela Vocacional de Arte José María Heredia (Música-Ballet-Danza), Guantánamo Escuela Vocacional de Arte Regino Botti Música-Danza, Isla de la Juventud Escuela Vocacional de Arte Leonardo Luberta Música-Danza
Nivel Medio
Escuelas Nacionales de Arte
• Conservatorio Nacional de Música
• Academia Nacional de Ballet
• Academia Nacional de Danza
• Academia Nacional de Teatro
• Academia Nacional de Espectáculos Musicales
• Academia Nacional de Circo y Variedades
• Escuela Nacional de Bibliología y Técnicas Documentarias.
Escuelas profesionales de subordinación provincial
• Academia de Artes Plásticas “Carlos Hidalgo”. Pinar del Río
• Academia de Artes Plásticas “San Alejandro”. Ciudad de La Habana
• Conservatorio Amadeo Roldán. Ciudad de La Habana
• Academia de Artes Plásticas “Roberto Diago”. Matanzas
• Conservatorio de Música y Academia de Danza y Artes Plásticas Samuel Feijoo. Villa Clara
• Academia de Artes Plásticas “Oscar Fernández”. Sancti Spíritus
• Conservatorio “José White”. Camagüey
• Academia de Ballet y Artes Plásticas. Camagüey
• Academia de Artes Plásticas. Las Tunas
• Conservatorio “José M. Ochoa”. Holguín
• Academia de Artes Plásticas “El Alba”. Holguín
• Conservatorio “Esteban Salas”. Santiago de Cuba
• Academia de Artes Plásticas “José J. Tejada”. Santiago de Cuba
• Academia de Artes Plásticas ” Wifredo Lam”. Isla de la Juventud

IV

Logros en materia de infraestructura de escolar en los primeros 30 años de Revolución

Si fuéramos a hablar de otro gran logro de la Revolución, la construcción de escuelas ocupa un lugar privilegiado.

Una de las primeras medidas de la Revolución en el poder en el año 1959 fue convertir los cuarteles militares de la tiranía en centros escolares.

El esfuerzo dedicado por Cuba, los cuantiosos recursos empleados, dan la medida de la importancia que se le dio desde los primeros momentos a la educación, asombra ver la obra realizada, si se tratara de un país no sometido a una brutal guerra económica, y recalco, no bloqueo, menos embargo, sino guerra económica porque de eso se trata, guerra que va desde el sabotaje interno, la persecución de cuanto negocio emprende la isla, la amenaza a proveedores y socios extranjeros, impedir en acceso a los créditos y el financiamiento externo, impedir la compra de productos necesarios, materias primas, maquinarias, imposibilitar la venta de producciones cubanas, robo de recursos, decomiso arbitrario de productos, robo de firmas y un largo etc. Sería digno de reconocerse, pero es que Cuba lo ha logrado a pesar de esa guerra económica. ¿Cuánto más se podría haber logrado sin el cerco inhumano, sin la hostilidad sin cuartel a que nos ha sometido el imperio desde hace más de 50 años?
Vamos a enumerar algunos ejemplos de las escuelas construidas, estas cifras no necesitan comentarios, hablan por si solas.
En 1970 se entregaron dos Secundarias con una capacidad total de 1.000 alumnos.
En 1971 fueron entregadas ocho instalaciones escolares con una capacidad total de 4.400 alumnos. En 1972 se pusieron en servicio 46 instalaciones escolares con una capacidad total de 23.800 alumnos.
El plan para 1973 establecía la terminación de 99 instalaciones escolares con una capacidad total de 60.860 alumnos.
Al final del quinquenio 1971-75 se alcanzó una producción anual de edificaciones escolares prefabricadas de 150 módulos de Secundaria Básica en el Campo o su equivalente en otros tipos de escuelas, que permitió incrementar anualmente en 90.000 alumnos la capacidad de los internados de enseñanza secundaria y media.
Escuelas para la Formación de Maestros.
Se entregaron hasta 1978, 13 Escuelas Pedagógicas de un total de 18 a construir según el plan, con capacidades entre 2.000 y 4.500 estudiantes internos cada una. Estos centros están vinculados con escuelas donde los alumnos realizan sus prácticas docentes.
Escuelas Vocacionales.
El objetivo de las escuelas vocacionales consistía en la orientación de los mejores estudiantes hacia las carreras universitarias relacionadas con la tecnología y las ciencias que más necesarias se consideran para el desarrollo del país. Se habían programado 15 escuelas de este tipo, de las cuales 7 estaban funcionando o en construcción en 1979. Las capacidades de dichas escuelas son de 2.500 ó 5.000 alumnos según la población de la provincia en que se ubicaba.
Por sus dimensiones, funciones y servicios constituyen verdaderos conjuntos urbanos. Incluyen, además de las aulas y dormitorios, cine, biblioteca, hemeroteca, laboratorios y círculos de interés científico técnico, museo de ciencias, salones exposiciones científico-técnicas, centro de cálculo, gimnasio, salas polivalentes, salones de danza, teatro, música y artes plásticas y extensos campos deportivos con piscina olímpica, instalaciones de campo y pista, etc. Las escuelas disponen además de terrenos para el trabajo y la experimentación agrícola. Todas estas instalaciones se enlazan mediante galerías, plazas y patios interiores de diversos tamaños.
La Escuela Lenin en La Habana, fue la pionera de estas escuelas con cerca de 5.000 becarios. Esta escuela fue inaugurada oficialmente a principios de 1974 La Escuela Vocacional de Holguín es semejante a la Lenin en sus dimensiones y criterios de diseño. En Camagüey la Escuela Máximo Gómez, con capacidad para 2.500 alumnos, formaba parte del anillo de instalaciones escolares que rodea la ciudad. De esa misma capacidad es la Vocacional Federico Engels, de más reciente terminación y que se vio enriquecida por las experiencias obtenidas en los proyectos anteriores. Las Vocacionales sirvieron como campo de experimentación para la integración de la obra de los artistas plásticos, con la serie de murales en la Escuela Lenin y las esculturas conmemorativas de Camagüey y Pinar del Río.
Escuelas Deportivas

Para la promoción del deporte se desarrollaron las Escuelas de Profesores de Educación Física (EPEF) y las Escuelas para la Iniciación Deportiva (EIDE). Se habían construido o estaban en terminación en 1979, 5 EPEF en centros urbanos principales como Santiago de Cuba, Holguín, Camagüey, Pinar del Río y Santa Clara, con capacidades entre 500 y 1.000 alumnos. Estas escuelas se situaron junto a las instalaciones deportivas a nivel de ciudad. Las mismas cuentan con laboratorios especializados. Las EIDE combinan el estudio normal con el trabajo y el deporte, incluyendo la preparación de 10 especialidades deportivas diferentes. Sus capacidades varían de 1.000 a 2.000 becarios. En 1979 ya se disponía de 8 escuelas de este tipo terminadas o en construcción, en diferentes ciudades.
Escuelas e Institutos Politécnicos
Los centros politécnicos constituían el porcentaje mayor de la educación media y se ubicaban junto a centros industriales, forestales, mineros, ganaderos, agrícolas, de la salud, etc. Los componentes de estos conjuntos son usualmente típicos en la parte docente y en los dormitorios, siendo solamente diferentes las naves para la especialización. Entre los numerosos centros tecnológicos construidos se pueden mencionar los de la Electrónica, del Astillero Naval y del Combinado Lácteo en La Habana, el Forestal y el de Salud en Pinar del Río, el Mecánico y el de Refrigeración en Santa Clara, el de la Construcción en Cienfuegos, el Ganadero en Camagüey, el de la Agricultura en Matanzas, los del Azúcar junto a los ingenios azucareros, etc.
Escuelas Secundarias Urbanas (ESBU)

En el quinquenio 1976-80 la demanda para las enseñanzas secundaria y media duplicó las cifras de 1975. La nueva demanda se fue resolviendo con escuelas en las ciudades, sin internado y con índices de construcción mucho más austeros. Las secundarias urbanas, se sitúan al nivel de los micro distritos de viviendas, con proyectos para 600 y 1.200 alumnos resueltos en 3 y 4 plantas respectivamente. Sólo constan de las instalaciones docentes indispensables tales como aulas, talleres, laboratorios y campos deportivos. El área de construcción de la secundaria urbana es tal que permitía una utilización 5 veces más intensa que la Secundaria Básica en el Campo. Para el curso 1977-78 ya estaban en funcionamiento 60 unidades del tipo descrito.
Escuelas Politécnicas Urbanas (EPTU)
Dentro del mismo criterio de multiplicar la efectividad de los recursos dedicados a las construcciones escolares se proyectaron las Escuelas Politécnicas Urbanas para la formación de obreros calificados. La capacidad programada para estas escuelas era de 1.000 alumnos en dos turnos de clases. Entre las especialidades que se estudian en esas escuelas están las de mecánica, soldadura, electricidad, carpintería y construcciones.
Círculos Infantiles
Otra instalación complementaria del sistema escolar es el círculo infantil, que atiende a los niños en edad preescolar cuyas madres trabajan. El círculo infantil recibe niños de edades comprendidas entre los 45 días de nacido y los 5 años. Se construyeron círculos de una planta para capacidades de 120 a 180 niños y en dos plantas para 180 niños. A manera experimental se edificaron algunos círculos para 180 niños en 3 plantas, ubicados en las zonas más congestionadas de la ciudad de La Habana.
Institutos Superiores y Universidades
El esfuerzo principal en el campo de las edificaciones escolares se dirigiría hacia los centros de enseñanza superior. En 1959 había en el país menos de 3 estudiantes de ese nivel por cada 1.000 habitantes. Este índice había aumentado en 5 veces hasta 1978, contándose en ese año con 14,5 estudiantes de nivel superior por cada 1.000 habitantes.

La enseñanza superior se había enriquecido también en términos de especialización. El número de carreras profesionales que se estudiaban en el país aumentó de 24 a 40 . Esta especialización determinó el surgimiento de una variada tipología entre los centros de nivel superior. En 1979 se proyectaron y construyeron nuevos centros universitarios, institutos superiores politécnicos, institutos superiores de ciencias agropecuarias, de ciencias médicas, minero-metalúrgicos, pedagógicos y de economía, distribuidos entre casi todas las provincias.
Esto es solo un recorrido por este tema durante los primeros años de la Revolución, hasta los años 80, después de esa década, disminuyó el ritmo de construcción de centros educacionales, al estar cubiertas las necesidades, aunque se abrieron escuelas de Instructores de Arte, Trabajadores Sociales, la Escuela Latinoamericana de Medicina, etc. Lo logrado por Cuba en el campo de la educación es paradigmático y demuestra que con pocos recursos, cuando hay la voluntad política necesaria y se le une a esa voluntad el empeño de un pueblo trabajador se pueden hacer grandes cosas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario