22 de febrero de 2018

Centenario del Ejército Rojo de Obreros, Soldados y Campesinos

Por Nestor Guadaño.

"Cualquier revolución sólo vale algo si sabe defenderse..."
                                                                              Lenin 

Este año celebramos una reivindicación imprescindible en el devenir emancipatorio de la clase obrera, la creación y nacimiento del Ejército Rojo.

Sus inicios

Pero el Ejército Rojo tuvo sus predecesores, los milicianos de 1905. Al día siguiente del Domingo Sangriento (9 de Enero) las voces iracundas de los bolcheviques proclamaban: "¡Sois testigos de las ferocidades del gobierno autocrático. -se decía en una octavilla- Habéis visto la sangre derramada en las calles!...¿Quién enfiló a las tropas, los fusiles y las balas contra los pechos de los obreros? El zar, los grandes príncipes, los ministros, los generales y la canalla palaciega.
¡Ellos son los asesinos! ¡Muerte para ellos! ¡A las armas, camaradas!".

En muchas regiones industriales del país, los bolcheviques crearon las primeras milicias obreras, que lucharon contra la reacción. La última orden del Estado Mayor de las milicias, que combatían en la barricada de la Presnia en Moscú, vaticinó: "El futuro pertenece a la clase obrera. En todos los países, generación tras generación, aprenderán qué es tenacidad en la experiencia de la Presnia".

100 лет Рабоче-Крестьянской Красной Армии и Флоту

  "Por nuestra Tierra Madre Soviética"

De forma clandestina las organizaciones bolcheviques, con autodisciplina mantuvieron la memoria de sus milicianos caídos. Así en febrero de 1917, los obreros de Petrogrado, Moscú, los Urales, del Donbáss y de otros centros industriales formaron destacamentos armados a los que llamaron "milicia obrera", "grupos de combate" o "guardia obrera". Formados de los obreros más avanzados y conscientes, unían sus luchas con los bolcheviques, asaltaron arsenales, y también se unieron algunos soldados partidarios de la revolución.
Los primeros soviets cercanos a Moscú denominó a estos destacamentos "Guardia Roja". Así el primer reglamento de la Guardia Roja de Moscú advertía: "La observancia rigurosa de la disciplina y el cumplimiento incondicional de las disposiciones para el servicio de los jefes elegidos... no se basan en la fuerza de la subordinación ciega, sino en la comprensión de la importancia y responsabilidad extraordinarias que tienen las tareas que realizamos".

Eseristas, Mencheviques y el Gobierno Provisional Burgués, procedió a liquidar y desarmar a la Guardia Roja. En la Manifestación de Julio, ametrallaron a los obreros, realizando miles de detenciones, restableciendo la pena de muerte en el frente. Pero la reacción envalentonada fue a más. 

El General Kornilov lanzó sus fuerzas sobre Petrogrado, para implantar una dictadura militar. Los bolcheviques en la clandestinidad lanzaron la consigna de hacer frente a la contrarrevolución. De nuevo se formaron a toda prisa nuevos destacamentos de la Guardia Roja. Con la imprescindible ayuda de los Guardias Rojos, muchos marineros y soldados se hicieron revolucionarios, aplastando la "korniloviana".
Así en Octubre los nuevos destacamentos fabriles, distritales y urbanos de la Guardia Roja tenían más de 200.000 efectivos.

En vísperas de Octubre

Лекция Великая Октябрьская социалистическая революция

Pero las diferencias con las fuerzas burguesas que intentaban mantenerse en  el poder en las ciudades, a costa de los sufrimientos de toda la población, chocaba con las consignas bolcheviques de "Todo el poder a los Soviets".

Lenin una vez volvió a Petrogrado, preparó con el Comité Central la insurrección armada. Se creó un Centro Militar Revolucionario (CMR), encabezado por N. Podvoiski, quien destinó comisarios a todas las unidades militares de la guarnición de la capital, y a los destacamentos revolucionarios de la Flota del Báltico.
El asalto al viejo mundo se realizó la noche del 6 al 7 de noviembre (24-25 de Octubre del viejo calendario). Los Guardias Rojos, los soldados y marineros revolucionarios resueltamente bajo la dirección del Partido Bolchevique tomaron Petrogrado.

Lenin emitió el siguiente comunicado al mundo entero: "¡Camaradas! la revolución obrera y campesina de cuya necesidad hablaron siempre los bolcheviques, se ha realizado.
... Se inicia hoy una nueva etapa en la historia de Rusia, y esta tercera revolución rusa debe conducir, en fin de cuentas, a la victoria del Socialismo".

Defendiendo el Poder Soviético

Resultado de imagen de Imágenes del Ejército Rojo

El II Congreso de los Soviets de toda Rusia formó el Gobierno soviético, el Consejo de Comisarios del Pueblo (Sovnarkom), del que V. I. Lenin fue designado responsable. El Congreso eligió el Comité Ejecutivo Central de toda Rusia (CEC), siendo elegido su presidente Y. Sverdlov.

El Comisariado para el Ejército y la Marina estaba compuesto por V. Antonov-Ovséienko, miembro de los comités milicianos de 1905-1906; el alferez N. Krilenko, miembro del partido desde el año 1904, y el marinero P. Dibenko miembro de la Flota del Báltico, y del partido en 1912. Este fue el Comité Militar llamado Narkomvoenmor.

Las tareas militares exigían mucha responsabilidad: Extender y consolidar la victoria de la Revolución Socialista de Octubre, sacar al país de la Guerra Imperialista y liquidar el viejo ejército, como baluarte del antiguo régimen, y constituir un nuevo ejército de obreros y campesinos.

La contrarrevolución contratacó a las órdenes de Kerenski con las unidades cosacas del General Krasnov sobre Petrogrado. El CMR envió a su encuentro a los destacamentos de la Guardia Roja, las unidades revolucionarias de la Guarnición de Petrogrado y a los navíos de la Flota Roja del Báltico. En Púlkovo fueron derrotadas las fuerzas reaccionarias.

Pero los bolcheviques sabían que la victoria no solamente se lograba con las armas, sino también con las palabras apasionadas y veraces a los soldados que no sabían que una nueva sociedad estaba germinando.

Dibenko, comisario marinero se dirigió a Gatchina, donde se concentraban el grueso de las tropas cosacas, a su alrededor se concentraron y realizó algo tan sorprendente para ellos como un mitin improvisado, explicando con palabras sencillas los verdaderos fines del Poder Soviético. En sus memorias el General Krasnov dijo que Dibenko "fascinó durante varias horas, no solamente a los cosacos, sino también a muchos oficiales". Por la mañana los reunidos exigieron: cesar inmediatamente la guerra contra los Soviets y detener y entregar al Gobierno Soviético a Kerenski y Krasnov, cabecillas de la sublevación. 

Los cosacos se pasaron a las tropas revolucionarias deteniendo a los instigadores Krasnov y su estado mayor, huyendo disfrazado de marinero el propio Kerenski.

Mientras en Moscú se libraban duras batallas por el Poder Soviético. Fue fundamental la ayuda de los obreros de las fábricas de Tula, Vladimir y de otras ciudades. Desde Ivánovo y Shuya llego un destacamento mixto de trabajadores y soldados bajo el mando de Mijaíl Frunze. Imponiendose el Poder de los Soviets, así como en Kíev, Járkov, Tashkent y la mayoría de las ciudades importantes toda Rusia.

Principio de La Guerra Civil

"Me parece, que lo principal, que generalmente se olvida o se le presta escasa atención, por lo cual se traban tantas discusiones, quizás vanas, sin finalidad, es el carácter de clase de la guerra, sus causas, las clases que la sostienen, las condiciones históricas e histórico-económicas que la han engendrado" (1).

El viejo mundo no consideraba su derrota como definitiva. Los generales crearon el "Ejército Voluntario" blanco. A ellos se unieron nacionalistas burgueses ucranianos, kulaks de los urales crearon pagados ejércitos en los Urales y en el Turkestán. Para mantener el Poder Soviético los destacamentos rojos se movilizaron desde Petrogrado, Moscú, Jarkov, el Donbáss, Vorónezh, Tsaritsin, Samara y otras ciudades en columnas de 2.000 a 10.000 milicianos. En todos los frentes las columnas rojas triunfaron.

Mas los bolcheviques vieron claramente la necesidad de crear un ejército fuerte para defender la República de los Soviets contra los imperialistas y la contrarrevolución interna. Había que liquidar el viejo ejército y crear uno nuevo de obreros, campesinos y soldados.

Había que salir de la Guerra Imperialista y firmar la paz para liquidar el antiguo ejército que estaba en el frente, con sus generales y oficiales reaccionarios. El II Congreso de los Soviets invitó a que los soldados y marineros eligieran comités revolucionarios, el gobierno abolió todos los grados y rangos antiguos, implantó la elegibilidad de mandos y reconoció los comités elegidos de soldados y marineros como órganos de poder.

Uno de los primeros decretos del Gobierno Soviético fue el de conceder la tierra a los campesinos, y como los campesinos eran mayoría en el ejército, abandonaron el frente. 

Formación del Ejército Rojo
 


Pero a también el 16 de Enero del año 18, Lenin explicó en la "Declaración de los derechos del pueblo trabajador y explotado": "Con el fin de asegurar la plenitud de poder de las masas trabajadoras y conjurar toda posibilidad de restablecer el poder de los explotadores, se decreta el armamento de los trabajadores, la formación de un ejército rojo socialista de obreros y campesinos, y el desarme completo de las clases pudientes". El 28 de Enero de 1918 el Consejo de Comisarios del Pueblo articuló el llamado "Decreto sobre el Ejército Rojo".

La inscripción en el Ejército Rojo y la formación de sus primeros destacamentos y regimientos corrían a cargo de las secciones militares de los Soviets, y de las comandancias de la Guardia Roja. 

La situación era muy grave, pues Inglaterra, Francia y otros países se negaban a reconocer al Gobierno Soviético. V. I. Lenin propuso que era necesario concretar la paz con Alemania, por muchas condiciones duras que impusieran los militaristas germanos, a fin de consolidar el Poder de los Soviets y formar el Ejército Rojo.

Entre los bolcheviques el grupo llamado "comunistas de izquierda" se oponía a que se firmara la paz. Trotski, jefe de la delegación de paz soviética, contraviniendo la decisión del Consejo de Comisarios del Pueblo y de las indicaciones directas de Lenin, se negó a suscribir las condiciones de paz, y cesó las negociaciones. Aprovechándose de ello los militaristas teutones violaron el armisticio y el 18 de febrero emprendieron la ofensiva en todo el frente, desde el Báltico hasta el Mar Negro. Los contrarrevolucionarios y las hordas ocupantes alemanas creyeron que sin un Ejército de los Soviets aniquilarían el Poder Soviético en semanas.

Ante tal peligro el Gobierno Soviético pidió nuevas negociaciones para la paz, desoídas por los alemanes. Así el 21 de febrero el Consejo de Comisarios del Pueblo aprobó el "Decreto-Llamamiento. ¡La Patria Socialista está en peligro!".

El 23 de Febrero de 1918, el Soviet de Petrogrado proclamó "Jornada en Defensa de la Patria Socialista". Miles y miles de obreros de la capital ingresaron ese día en el Ejército Rojo. En todas partes y, especialmente en la zona contigua al frente, se formaban destacamentos y regimientos que salían inmediatamente para las primeras líneas. No tardó el enemigo en sentir la fuerza de la ira popular. En los accesos a Revel, Gdov, Pskov, Polotsk, Vítebsk, Moguiliov, Gómel, Zhitomir, Kíev y en otros sectores del frente, las tropas alemanas chocaron con una resistencia cada día mayor.

Desde entonces el 23 de Febrero se hizo una fiesta en todos los pueblos, pues fueron sus obreros y la Guardia Roja, quienes hicieron posible la creación del Día del Ejercito Rojo. En 1919 así se instituyó este día.

Por las derrotas sufridas, los militaristas germanos firmaron el 3 de Marzo, la paz en Brest.


Notas:

1.- V. I. Lenin. Obras Completas. Editorial Política. La Habana 1963. Tomo XXVI, página 395.


Índice de Referencias:

- "El Ejército Soviético". Diferentes autores. Editorial Progreso. Moscú 1974. Traducido por Joaquín Rodríguez. 
- "Al servicio del Pueblo". Kiril Meretskov. Editorial Progreso. Moscú 1974. Traducido por César Astor. 
- "Destacados jefes militares en la Gran Guerra Patria de 1941-1945". N. Svetlishin. Editorial Progreso. Moscú 1985. Traducido por R. Vidiella. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario