Descenso de mortalidad infantil en Kerala, gobernada por el Partido Comunista de la India, marxista.

Extraido de www.civilizaciónsocialista.blogspot.com

Lenin, más vivo que nunca en Kerala

El estado indio de Kerala es gobernado desde la independencia por el Partido Comunista de la India y despues de la escision, por el PC de la India (Marxista) por sufragio universal. Las políticas sociales de los comunistas ofrecen resultados extraordinarios mientras que en la mayoría de los estados gobernados por la burguesía, las masas populares sufren horribles condiciones de opresión, hambre, enfermedades y miseria. Un informe de la ONG Save The Children titulado A fair Chance at Life: Why Equity Matters for Children establece que en Kerala las condiciones sanitarias de los recién nacidos y niños antes de los 5 años son considerablemente mejores que en otros estados indios. Por ejemplo la tasa de mortalidad de recien nacidos en Kerala es de 7 por mil nacidos mientras que en Maddhy Pradesh es de 48 por mil. Si en Kerala la tasa de mortalidad de los menores de 5 años es de 10 muertos por mil nacidos, en Uttar Pradesh es de 97 por mil. Ahora hace falta que los comunistas tomen el poder en toda la India, se produzca la reunificación voluntaria entre Paquistán y la India y se construya una formidable Democracia Popular en el Sudeste asiático.

Aún hoy, hay países capitalistas que tienen un atraso social tan profundo, que estas noticias suponen un ejemplo liberador para los pueblos, donde la religión y las costumbres son una cruel carga para la felicidad de sus habitantes. En la India esta realidad maquillada por la permanente tiranía de los medios de comunicación corruptos capitalistas de todo el mundo, es más dramática. No solamente por el sistema de castas, por la explotación de las mujeres y los niños, por la falta de alimentación, sanidad, empleo, etc., sino también principalmente, por el abismo entre las élites burguesas indias y la mayoría de la población. Una dictadura que se apoya en una cultura que subyuga la mente de los trabajadores, a través de bramahanes, imanes y monges, para aceptar la explotación de los poderosos ricos y jefes de las familias políticas indias.

El proletariado indio debe mirar al norte, debe mirar al vecino estado de Nepal, donde la lucha por una nueva sociedad construida por los comunistas, permitirá sin duda, destruir la horrorosa explotación del imperialismo.