31 de agosto de 2011

Nepal inviste a su Primer Ministro: el Partido Comunista toma el mando


Recogido de Prensa Latina
El parlamento nepalí eligió ayer como primer ministro a Baburam Bhattarai, del Partido Comunista de Nepal-Maoísta (PCN-M), en una inesperada primera ronda de votaciones.

El parlamento nepalí eligió ayer como primer ministro a Baburam Bhattarai, del Partido Comunista de Nepal-Maoísta (PCN-M), en una inesperada primera ronda de votaciones.

Cuarto político que ocupa ese cargo en tres años y trigésimo quinto en la historia de la pequeña nación del Himalaya, Bhattarai aventajó por 340 a 235 votos al candidato del centro-derechista Partido del Congreso Nepalí, Ram Chandra Poudel, gracias al apoyo de los partidos más pequeños del sur del país.

El nuevo primer ministro prometió completar el dilatado proceso de paz en que está inmerso el país desde el 2006, cuando los maoístas renunciaron a la lucha armada como opción al poder, así como adelantar el proceso de redacción de una nueva Constitución.

Su predecesor, Jhalanath Khanal, del Partido Comunista de Nepal (Unificado Marxista-Leninista), renunció a principios de agosto tras siete meses de infructuosos esfuerzos en el puesto por alcanzar aquellos objetivos.

Uno de los empeños más difíciles de Bhattarai consistirá en rehabilitar a los casi 20 mil antiguos miembros del Ejército Popular de Liberación que aún esperan en sus campamentos, sin abandonar las armas, las garantías de una existencia digna y segura.

El PCN-M es partidario de integrar a la mayoría de ellos a las Fuerzas Armadas regulares, una propuesta a la que se resisten los altos jefes militares del país y los líderes del PCN.

De la solución o no del asunto dependerá en gran medida o el éxito o fracaso del proceso de paz.

El flamante primer ministro también deberá maniobrar para llevar a buen puerto la nueva Constitución, pero de seguro solo podrá hacerlo en una fecha posterior al 31 de agosto, cuando expira la vigencia de la Asamblea Constituyente.

Para sortear los grandes obstáculos que tiene por delante su magistratura, Bhattarai, de 57 años y considerado un moderado dentro de las filas maoístas, deberá procurarse el apoyo de sus compañeros de línea dura y, al propio tiempo, de los partidos de oposición.

Pese a las complejas tareas que se le avecinan, al conocer su triunfo dijo que "el país tiene un futuro brillante" y aseguró que bajo su dirección "podrá completarse el proceso de paz y la redacción de la Constitución".

27 de agosto de 2011

Sverdlov, el diamante bolchevique, indispensable para la Revolución de Octubre


Por Oleg K.

Yákov Mijáilovich Sverdlov (en ruso Яков Михайлович Свердлов) es una de esas figuras comunistas que dificilmente se puede creer que hayan existido. Su vida, su personalidad y sus actuaciones parecen haber sido cosa de muchos revolucionarios, pero solamente era Yákov quienes las encarnaba. Su compañero y camarada, Vladimir Ilich Ulianov “Lenin”, dijo tras su fallecimiento: “Estos hombres son indispensables, para sustituirlos necesitaríamos un equipo conjunto de los demás”.

Con 16 años se afilia al Partido

Yákov Sverdlov nació en Nizhny-Novgorod el 22 de Mayo de 1885, y falleció en Oriol el 16 de Marzo de 1919, a causa del tifus. Este pequeño viaje a su vida, es un pequeño homenaje a este increíble comunista, subterráneo, que no escribió libros, ni realizó hazañas heroicas. Pero conocer su actividad es como un auténtico manual de cómo tienen que comportarse los miembros de una organización revolucionaria.

Hijo de Mijail Izraelevich Sverdlov, un modesto grabador judío, su madre fue Elizabeth Stern. Su padre abandona el judaísmo y convierte a la religión ortodoxa, una vez muerta su primera esposa. Tras muy fuertes discusiones con su familia y entorno, Yákov aborrece de la religión por ser la “principal cadena que ata a las mentes con la opresión”. Estudia vorazmente los escritos revolucionarios. Conoce en su ciudad natal a Máximo Gorki. En 1901 entra en el Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia (POSDR), y un año después apoya la fracción bolchevique. El Partido le envía a Ekaterimburgo (que más tarde será renombrada Sverdlovsk en su honor) para tareas de organización de los bolcheviques en los Urales. En muy poco tiempo las células de esos territorios sufren una mimética transformación y se convierten en baluartes revolucionarios; y el propio Yákov, impregnado del carácter reflexivo y a la vez austero de sus habitantes, comparte sus costumbres, su hablar, siendo calificado por muchos de sus camaradas como un típico ruso de los Urales. Tuvo diversos pseudónimos: "Andréi", "Mijailich", "Maks", "Smirnov" y "Permiakov". Tuvo un papel destacado en la Revolución de 1905 (en octubre de 1905 fundó y dirigió en Ekaterimburgo el Consejo de Diputados Obreros) junto con otros revolucionarios clandestinos. En aquellos días, se necesitaba una mente rápida y clara para explicar las consignas revolucionarias. De las fábricas a los pueblos, de los talleres a las reuniones clandestinas de los míseros poblachos obreros, se convirtió paulatinamente en un excelente orador, un cualificado tribuno popular.

Este íntimo conocimiento de cada uno de sus camaradas, de sus penurias, de la lucha de los obreros por su emancipación, iban a serle de enorme utilidad más en adelante, al desplegar ese conocimiento en la labor práctica de organización del Partido.

El exilio siberiano


Muy pronto, la “Ojrana” (policía zarista) se fija en esta portentosa actividad. Detenido en 1906, es deportado a Siberia. Su azarosa existencia en aquellos años consistió una continua actividad que se debatía entre ser capturado y escapar del exilio. En 1909 está en Moscú, organizando la estructura del POSDR, pero es nuevamente detenido. Consigue fugarse, pero le detienen otra vez para ser deportado por cuatro años. Vuelve a escapar, y en esta ocasión teme por su vida al quedar atrapado en un bloque de hielo, pero consigue salir, y es nuevamente atrapado. Sabía que su trabajo era importante en aquellos años de extraordinaria participación revolucionaria, y que deseaba trabajar en el seno de su clase, y no apartado de ella. Lunacharski comenta de aquella época: "Yo sabía que él era un luchador incansable por la democracia social, por el bolchevismo, sabía que estaba siendo constantemente enviado a la cárcel y al exilio, de donde escapó siempre. Cada vez que le cogían y ponían tras las rejas, escaparía de nuevo otra vez, no importa que en el futuro lo volviesen a prender, volvería a comenzar la organización de comités bolcheviques y células”. Pero no estuvo ocioso en aquellos años de forzado encierro. Devoraba los textos del marxismo, y junto con otros exiliados iba aprendiendo de memoria las estructuras de los miembros del partido en las diferentes regiones, iba componiendo en su privilegiada memoria un mosaico inmenso de camaradas y territorios, sin papeles, mentalmente.

En 1912, tras fugarse de nuevo, trabaja en el diario bolchevique Pravda. Su segunda compañera en aquel tiempo es Claudia Timofeevna, alias Olga Novgorodtseva, que nos dejó una biografía pormenorizada de aquellos importantes días. Tuvieron un hijo, Andrei. Durante un breve periodo de libertad, Yákov es elegido miembro del Comité Central del Partido, pero es denunciado por el agente zarista Rodión Malinovsky. De nuevo es deportado, pero esta vez ya con fuertes medidas de seguridad. En aquellos años en el exilio de Narym y Turukhansk, trabaja, estudia, y desarrolla la organización de los camaradas siberianos junto con Stalin. En 1917 ,tras la Revolución de Febrero, el Gobierno Provisional lanza una amnistía general. Yákov sale del exilio y marcha a Petrogrado. El Comité Central le elige Secretario del Partido; de entre todos sus miembros, era él una mente privilegiada en conocimientos, y su capacidad de organización sobresalía sobre el resto; Lunacharsky escribió: "Su memoria contiene algo así como un diccionario biográfico del comunismo".

En Julio de 1917, cuando la policía zarista detiene a la mayoría de los miembros del Partido bolchevique y de los eseristas de izquierda (unos son asesinados, otros encarcelados y otros, como Lenin, tienen que esconderse), Yákov no es detenido, y de forma clandestina se queda en Petrogrado. Bajo su dirección práctica, Yákov reorganiza el partido, imparte las órdenes para preservar a sus miembros de nuevas detenciones, anima con sus misivas a los militantes, quienes tras las manifestaciones obreras para derrocar al Estado burgués, al no haber obtenido los objetivos propuestos, consideraban que había que parar, pues gran parte de la organización estaba apartada. Yákov imprime una actividad inusitada para hacer que el Partido recobre el vigor de la lucha contra el terrorismo de la burguesía. Gracias a su inteligencia y su capacidad de trabajo, consolida el círculo dirigente bolchevique de la futura nueva ofensiva que desembocó en la Revolución Socialista.

Organizador de la Revolución de Octubre

Yákov desempeñó un papel crucial en la organización, desarrollo y planificación de la Revolución en Petrogrado. Miembro del Comité Ejecutivo del Comité Militar Revolucionario, preside las reuniones que del 10 al 16 de Octubre son mantenidas por el Comité Central del Partido, para tomar la decisión de iniciar la Revolución.

Durante dos años realiza un trabajo inaudito de organización. Vertebra todas las organizaciones del Partido en Rusia, asignándoles funciones, preparando borradores para dar las pautas principales de los decretos; enviando delegados, enlaces, órdenes, cada minuto, día a día. Junto a él se creó un ejército de militantes, mujeres y hombres, para dar salida a sus urgentes comunicados. Hacia él emanaban las decisiones prácticas de Lenin. Nadie sabía cuando y donde dormía o comía. A cualquier hora del día y de la noche, estaba en su pequeño despacho escribiendo y cursando los imperativos mandatos. Era un férreo instrumento de unión del Partido, un cable de transmisión directa entre el gobierno soviético y la clase obrera, abarcando toda Rusia. Era tal la confianza que se tenía en él, que cuando los camaradas querían comprobar si las órdenes eran ejecutadas, Lenin les decía: “… se lo diremos a Sverdlov y el asunto se arreglará”. Delegado al Segundo Congreso Pan-Ruso de los Soviets, Yákov es la voz de la fracción bolchevique.

Días más tarde, asiste a los debates para la creación de la Asamble Constituyente. Lunacharsky detalla de manera ejemplar como fue aquella reunión:

“Moisei Solomonovich Uritsky, el comisario de la Asamblea Constituyente, sorprendió a la gente por su tranquilidad durante ese día de agudo conflicto entre el gobierno soviético y los partidarios de la Asamblea, presentándose allí con carácter positivo, a pesar de la fiebre; en cambio Sverdlov, era flemático, por fuera y por dentro, sin límites en su confianza.

La gran mayoría de los delegados comunistas y socialistas-revolucionarios se fueron emocionando aquel día; todo el Palacio de Táuride zumbaba como un enjambre enojado: los social-revolucionarios habían estado difundiendo rumores de que los bolcheviques estaban conspirando para romper el ala Derecha y el Centro de la Asamblea Constituyente. Los rumores eran tales que los socialistas-revolucionarios habían resuelto medidas desesperadas, como una manifestación armada - que estaba en preparación, pero que nunca se materializó -, los defensores de la Asamblea decían que iban a oponer resistencia armada a la disolución de la Asamblea Constituyente, y, con el heroísmo típico de ese partido, ¡amenazaron con intentar, a la vista de todo el mundo, asesinar a algunos de los "usurpadores que habían traído la vergüenza sobre la revolución" por su "toma de los bancos del gobierno” a la fuerza!

En realidad, ni los bolcheviques ni los eseristas perpetraron tales excesos, ni siquiera los contemplaron. La única diferencia en el comportamiento de las dos partes reside en el hecho de que los bolcheviques no tenían necesidad de recurrir a las armas. Fue suficiente que el marinero Zheleznyak gritase "¡Dejad de parlotear y volved a casa!"… Fue en este ambiente nervioso cuando todos habían ocupado sus asientos y cuando la tensión había llegado a su punto más alto, cuando la Derecha y el Centro se levantaron para exigir la apertura de la sesión. Mientras tanto, Sverdlov había desaparecido. ¿Dónde estaba? Algunos delegados bolcheviques, siendo la mayoría, comenzaron a inquietarse. Un anciano de edad, elegido sin duda por ser el miembro de mayor edad, ya estaba tronando desde la tribuna y extendiendo el brazo hacia la campana. Los socialistas-revolucionarios decidieron abrir la sesión por iniciativa propia, utilizando a uno de los ancianos propuestas a la Asamblea. Pero en este momento, sin prisa y sin acelerar el paso, la figura de Sverdlov emergió como si hubiera surgido a través del suelo. Con su aplomo habitual avanzó hasta la tribuna, literalmente, sin tener en cuenta al eserista anciano venerable, tocó el timbre y con una modulación sin el menor rastro de tensión, en alta voz, con una calma glacial declaró abierta la primera sesión de la Asamblea Constituyente. Menciono estos detalles de esta escena, porque psicológicamente se estableció el tono para todo el curso posterior de la sesión. A partir de ese momento la izquierda se hizo dueña absoluta de la situación. El Centro, todavía furioso, parecía contraído con una mueca de dolor y se arrugó con la ducha fría que le dió Sverdlov. Éste, con un tono glacial, fue hablando para dejar claro la firmeza y la total decisión del gobierno revolucionario”.

En esa primera intervención, Yákov anunció “La Declaración de los Derechos de los trabajadores y explotados”, según la cual Rusia se proclamó República de los Soviets de Obreros, Soldados y Campesinos. De hecho, todo el poder paso a manos del Congreso de los Soviets ,y la Asamblea Constituyente fue abolida.

Es elegido Presidente del Comité Ejecutivo Central (VTsIK), a propuesta de Lenin, en sustitución de Kamenev. En Enero de 1918, preside la comisión que redacta la Constitución de la República Socialista Federativa Soviética de Rusia. De hecho, fue responsable del Estado Soviético hasta su muerte.

1918

Año excepcional en el desarrollo de la Revolución Soviética. Cada día se dividía en tres o cuatro días antiguos. La revolución estaba en peligro, el enemigo de clase interno y externo atacaba con todas sus fuerzas, y se acumulaban nuevas responsabilidades en los hombros de Sverdlov. Lenin es herido en un atentado. Yákov toma provisionalmente sus funciones políticas, siendo el encargado de dirigir con mano de hierro la lucha contra la contrarrevolución. Imparte, bajo su responsabilidad, las directrices para que se haga efectiva la firma del tratado de Brest-Litovsk con los alemanes, esencial para la supervivencia de la Revolución. Selecciona cuidadosamente a los miembros incorruptibles del Partido mandatándoles para que realizaran fielmente sus instrucciones, por los medios que fuesen. Era un gran psicólogo, de un simple vistazo conocía quién era el designado, qué es lo que había realizado, cuál era su principal aptitud y sobre todo si se podía confiar en él. Sus palabras eran breves y firmes cuando consignaba una cualidad o una deficiencia, pero dichas con delicadeza. Su memoria era inconmensurable. Por comodidad, Yákov vestía en todo momento un chaquetón negro, que más tarde se puso de moda entre los comisarios del Ejército Rojo.

Reunido bajo su dirección, el 30 de Agosto el Comité Central toma las medidas extraordinarias expuestas para acabar con la contrarrevolución, incluyendo el terror rojo. Informado en el hospital, Lenin detalla expresamente que todas las acciones se hagan por decreto del Comité Ejecutivo Central, con la firma de Sverdlov. Uno de sus principales objetivos es la preparación de cuadros comunistas para atender a las necesidades políticas de la población. Con la más enconada autodisciplina, se dedicaba a la formación, a dar charlas, sacando tiempo de donde fuera, creando una especie de escuela entre los instructores y agitadores del Comité Ejecutivo Central (en 1919 esta escuela se transformó en la Universidad Comunista Sverdlov, que en 1939 se transformó en la Escuela Superior del Partido, adjunta al Comité Central)

A todas sus funciones, se añaden los incesantes viajes que hizo por todos los frentes, por las regiones, para inculcar en la población las diferencias de clase del nuevo estado, de cara a la movilización general de los campesinos para la lucha contra el Ejército Blanco. De hecho, cuando en una localidad había que convencer a la población para que tomase las armas para defender a la Revolución Socialista, los camaradas designaban invariablemente a Yákov.

Su participación era insustituible, por su ímpetu, locuacidad y capacidad, por su utilización de palabras sencillas para aunar los sentimientos de rebeldía contra los opresores ricos junto con el apoyo al jóven Estado Soviético. Con voz baja, con palabras fáciles de entender, sobresalía de entre todos los oradores por su calma, aún en los momentos más tensos o desesperados. Su absoluto dominio de sí mismo, daba fuerza en sus oyentes, porque era su forma natural de hablar, sopesando en cada momento la palabra más justa. Participa en la organización de los Congresos de los Partidos Comunistas de Letonia, Lituania, Bielorrusia y Ucrania. Basándose en un ciclo de conferencias sobre la historia de la Internacional y los retos de la futura III Internacional, preparó un borrador para imprimirlo con el título "Ensayos sobre la historia del movimiento obrero internacional". No pudo terminarlo.

Sus enseñanzas

Participa en los preparativos del Primer Congreso de la Internacional Comunista en enero de 1919. Precisamente en aquel año, bajo las directrices inflexibles de Yákov Mijálovich Sverdlov, gracias al talento del equipo de organización del Comité Ejecutivo, con el apoyo de los obreros, campesinos y soldados, y con la participación activa de los mejores camaradas del Partido Bolchevique, se puso en pie el Estado Soviético. Una hazaña que hoy día ha quedado como una de las conquistas más importantes de la clase obrera mundial. De esa forma, se fue construyendo la URSS, con la participación de la mayoría de los trabajadores y campesinos, en la defensa de sus intereses.

Hacía tiempo que Yákov había cogido un resfriado. No se cuidaba debidamente, pero seguía trabajando, se negaba a guardar cama para tratar los estornudos. Bajo una tensión terrible, comiendo cachos de alimentos, durmiendo de tres a cuatro horas, casi al límite de su capacidad física, apenas tenía defensas. Contrae la fiebre tifoidea (tifus) en un viaje de Jarkov a Moscú, falleciendo en Marzo. Algunos revolucionarios dieron su vida en el campo de batalla, a otros en las cárceles del enemigo de clase, nuestro Sverdlov ofrendó su vida por la causa del Comunismo

Sus restos como homenaje están enterrados en la muralla del Kemlin. Una placa de mármol con su nombre está dentro del Mausoleo de Lenin, en Moscú. Al pie de su tumba, Lenin exclamó: “El camarada Yákov Mijailovich Sverdlov... no sólo es un símbolo eterno de devoción por la consecución de la Revolución, nos guiará como modelo de sobriedad y por su aptitud práctica de pleno contacto con las masas, a la vez que su actitud es ejemplo para el proletariado, para que sigamos adelante hasta la victoria completa de la Revolución Comunista Mundial”.

En su recuerdo

La Universidad Comunista Y. M. Sverdlov se fundó sobre la base de los cursillos de agitadores e instructores adjuntos al Comité Ejecutivo Central de toda Rusia, organizados por él en 1918. Más tarde, estos cursillos fueron reorganizados en la Escuela de Trabajos de los Soviets. Después de la resolución adoptada por el VIII Congreso del PC(b) de Rusia, de organizar una escuela superior adjunta al CC para preparar cuadros del Partido, la Escuela se transformó en Escuela Central de Trabajos de los Soviets y del Partido; en el segundo semestre de 1919, por decisión del Buró de Organización del CC del PC(b) de Rusia, la Escuela recibió el nombre de Universidad Comunista Y. M. Sverdlov.

Muchísimos dirigentes soviéticos e internacionales dieron en ella clases y tratados. Lenin dio en ella dos conferencias acerca del Estado. El texto de la segunda, pronunciada el 29 de agosto de 1919, no se ha conservado.

En la sociedad soviética casi todas las ciudades, aldeas y regiones tuvieron calles, nombres y monumentos a su memoria. En el cine soviético su ejemplo es reconocido en las películas: “Yákov Sverdlov” filmada en 1940, protagonizada por L. Lyubashevsky, y también “Lenin en Octubre”, “Lenin en 1918”, “El gran resplandor”, “El lado Vyborg” (interpretado por L. Lyubashevsky), “Vientos de hostilidad” (también interpretado por L. Lyubashevsky), “Orden de emergencia”, “El seis de Julio”, “Conspiración de los Embajadores”, “En los primeros días de Octubre”, “El tren de la mañana”, “Crackers Negro” (interpretado por V. Tatosov), “Apuntes para un retrato de Lenin” (interpretado por I. Kvasha), “La Gloria del Báltico”. Aparece en la serie de televisión “20 de Diciembre” y “Las nueve vidas de Nestor Majnó".

Obras consultadas:

* Obras escogidas de Sverdlov, en tres volúmenes. Moscú 1957. En Ruso.
* Figuras revolucionarias. Anatol Lunacharsky. Marxist.org.
* Klavdiia Timofeevna Sverdlova, Yákov Mijailovich Sverdlov: Vospominaniia, 2ª ed. (Moscú, 1960). (En ruso).
* Sverdlov, Yákov Mijailovich. Gran Enciclopedia Soviética. En ruso.

23 de agosto de 2011

Rusia, la sociedad en la que vivimos, rechaza al capitalismo


Por Viktor Trushkov, para Pravda, traducido por Josafat S. Comín

El 72% de los rusos ha experimentado en algún momento el deseo de "pasar por las armas" a especuladores y corruptos.


Recientemente se publicaron los resultados de un estudio sociológico pormenorizado: “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”. Los investigadores del Instituto de Sociología de la Academia de Ciencias de Rusia (IS ACR) en colaboración con una representación de la Fundación “Friedrich Ebert” en la Federación Rusa, llevaron a cabo un estudio sociológico en abril de 2011, con una muestra representativa de todos los territorios y regiones económicas del país, así como de Moscú y San Petersburgo. Fueron entrevistadas 1750 personas, mayores de edad en representación de 11 grupos sociales de población: Obreros de fábricas, minas y la construcción, profesionales de carreras técnicas e ingeniería, intelectuales de humanidades (científicos, profesores de universidad, maestros de escuela, profesores de secundaria); empleados de comercio, de la esfera de servicios, de transporte y comunicaciones; funcionarios, pequeños y medianos empresarios, militares y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad; habitantes de zonas rurales, jubilados en zonas urbanas; estudiantes universitarios; desempleados. La investigación se llevó a cabo en 58 núcleos de población y el conjunto de los encuestados fue proporcional a la población de las megalópolis, de las ciudades medias, de las ciudades pequeñas y de los pueblos.

El mérito del trabajo de investigación aún es mayor si tomamos en cuenta que cogieron como base empírica los resultados del estudio que se llevó a cabo por el Instituto de Estadística de la Academia de Ciencias en 2001: “La nueva Rusia, 10 años de reformas”.
Por cuanto la investigación se produjo siguiendo el mismo modelo de muestreo, utilizando una serie de preguntas tipo (indicadores), en el presente informe se presenta la oportunidad de realizar un análisis comparativo, que no solo arroja luz sobre el estado actual de la conciencia social, sino también sobre las tendencias de su desarrollo, y las particularidades de su manifestación en diferentes etapas de las reformas. Estamos refiriéndonos a los dos periodos en la vida del país: los años 90 y la primera década del 2000.

La tarea científica de esta concienzuda investigación se plantea del siguiente modo por sus responsables (director del colectivo de investigadores y del IS de la ACR, M.Gorshkov, y como responsable consultor, el director de la delegación rusa de la Fundación F.Ebert en Rusia, el doctor R.Krumm): “En un corto espacio de tiempo cambió prácticamente todo: el sistema económico y político, el gobierno, el modo de vida acostumbrado etc. Por eso es especialmente relevante volver la mirada a los acontecimientos de hace 20 años, y ver como son percibidos por las actuales generaciones de rusos. También es de excepcional importancia analizar el modo en que esos cambios influyeron en la vida de nuestros conciudadanos, en su bienestar material y social, en sus posibilidades de autorrealización, en la evolución de su percepción cosmovisiva, en su identificación nacional, en su visión del mundo que les rodea, en le papel y lugar en la vida de la sociedad, del Estado, de los institutos democráticos y sus normas, etc”.

El conocer el informe analítico permite tomar conciencia del enorme material empírico que allí aparece reflejado. Los 169 esquemas y gráficos que acompañan la investigación permiten hacerse una idea del volumen de los datos empíricos que han tenido que analizar los investigadores.

Lógicamente, los datos sociológicos concretos recogidos por los sociólogos, ofrecen la posibilidad de hacer varias lecturas de los mismos. Los autores del informe se han esforzado por abordar los acontecimientos de un modo objetivo, “auparse por encima de los intereses” de diferentes grupos sociales que conforman la Rusia actual. Ponen mucho celo en evitar las generalizaciones, en las que pudieran darse valoraciones negativas del sistema social, que se ha formado en estos 20 años de restauración capitalista. Incluso, para mantener ese conformismo en relación con aquellos, en cuyas manos se encuentran las riendas de la economía y política en la Rusia contemporánea, los sociólogos se permiten en ocasiones cierto eclecticismo metodológico. Un ejemplo claro de esto lo encontramos en la selección del muestreo: como ya hemos señalado anteriormente; los sociólogos parten de la base de que en la Rusia actual, los grupos sociales importantes están representados por los obreros, técnicos e ingenieros, intelectuales de humanidades, pequeños empresarios, etc. Sin embargo en el informe publicado no aparecen las relaciones entre los grupos sociales mencionados (en particular, entre obreros y empresarios) y los procesos y fenómenos políticos y sociales.

La elección del fundamento metodológico y la interpretación teórica del material empírico, es sin duda prerrogativa de los investigadores. Pero eso en modo alguno nos priva de nuestro derecho a analizar desde nuestra perspectiva ese riquísimo conjunto de datos sociológicos que arroja el informe: “Veinte años de reformas a ojos de los habitantes de Rusia”. Y por eso hemos decidido aprovechar nuestro derecho profesional y ciudadano de ofrecer hoy al lector esta primera publicación, en la que de un modo algo distinto que en el informe analítico, -no desde el punto de vista del positivismo, sino del materialismo histórico- se analiza ese material empírico que se presenta a la opinión pública en el trabajo conjunto del Instituto de Sociología de la ACR y de la Fundación Ebert. Cada una de las publicaciones que tenemos previstas se concentrará en una de las problemáticas socio-políticas concreta.

Este ciclo que se propone, no persigue en modo alguno reescribir un informe alternativo. Simplemente nos permitimos escoger del informe “Veinte años de reformas a ojos de los habitantes de Rusia”, aquellos aspectos de la investigación que ayuden a entender mejor, a la clase de trabajadores por cuenta ajena del trabajo físico e intelectual, sus intereses principales, incompatibles con el modo de vida capitalista, y ayuden a las masas de trabajadores a introducirse en la concepción marxista-leninista.


Distancia generacional

El año 2011 no guarda ningún parecido con un poste fronterizo. Y ni siquiera las elecciones parlamentarias de sexta legislatura en ciernes, harán que se parezca. Y sin embargo el 2011 cumple a la perfección el papel de mojón. Nos separan 20 años, no solo del golpe de estado “gorbachovo-yelsiniano”, también de la contrarrevolución, o lo que es lo mismo de la sustitución de un sistema político-social por otro, opuesto.

Lo interesante de estos veinte años que han pasado, no es que la cifra acabe en cero. Dos décadas son un intervalo generacional. Hoy van a pasar a la reserva de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia, unos chavales, que no conocieron el Poder Soviético: Son en el sentido más riguroso, hijos de la contrarrevolución burguesa de 1991, coetáneos de la restauración capitalista. Y que decir de los que acaban la universidad o una diplomatura. Los atributos materiales de su existencia antes de aquel agosto del 91, eran los pañales y los chupetes. Su socialización primaria, es decir, las primeras normas de conducta que aprendieron, el saber como coger la cuchara o la pronunciación de su primera frase con sentido, las aprendieron ya en la “época moderna”. Todo esto son también productos del modo de vida capitalista, impuesto al país hace 20 años.

Dos décadas suponen un periodo histórico significativo. Transcurridos 20 años desde la Gran revolución Socialista en la Unión Soviética, se celebraron –de acuerdo a la Constitución- las primeras elecciones al Soviet Supremo de la URSS, mediante voto directo y secreto. En su intervención en un acto electoral el 11 de diciembre de 1937, I.Stalin dijo: “El socialismo no solo es algo que estamos construyendo, se ha convertido en un modo de vida, en costumbre del día a día del pueblo. Hace 10 años aún podían caber discusiones sobre si podemos construir o no el socialismo. Hoy eso ya no es motivo de debate. Ahora es una cuestión de hechos concretos, de la vida misma, de la cotidianidad, que atraviesa toda la vida del pueblo. Es lo que llamamos socialismo con hechos. En nuestros campos trabajan la tierra sin latifundistas ni terratenientes. Dirigen los trabajos gente del pueblo. Eso es lo que llamamos socialismo”.

El sistema político y social soviético, solo necesitó 20 años para sentar las bases de la construcción del socialismo. ¿Les han bastado 20 años a los vencedores de aquella contrarrevolución burguesa de agosto, para consolidar el modo de vida capitalista en Rusia? Parece que sí. Como demuestran los datos del Instituto de Estadística, en el país hay cerca de 950 mil empresarios, es decir gente, que poseen medios de producción, grandes y medianos, sobre el principio de la propiedad privada; el 0,2% de la población del país es dueño del 70% de la riqueza nacional; 101 empresarios rusos tienen bienes por valor de más de mil millones de dólares. En el campo bajo el letrero de granjas, unos centenares de hombres de negocios son propietarios de latifundios, que en nada tienen que envidiar por su extensión a las haciendas de los mayores terratenientes de la Rusia zarista.

“20 años después de la Gran Revolución Socialista de Octubre la mayoría absoluta de la población en la principal de las encuestas sociológicas, -las elecciones generales- respaldó el curso socialista del Poder Soviético. ¿Qué ocurre hoy? Veamos la respuesta que dan en el estudio “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”: “en la sociedad todavía es objeto de discusión, la cuestión de si había alternativas a las reformas que se emprendieron, de si se podían haber elegido otras vías para su puesta en práctica. Entre las alternativas posibles a las “reformas de Gaidar”, los rusos mencionan en primer lugar, el desarrollo de las relaciones de mercado, pero sin democracia política (a menudo la definen como variante “china” o “chilena”, llegando al 29%9, y también la reforma de la sociedad manteniendo las bases de la construcción socialista, sin la privatización masiva, ni la liberalización del mercado (25%)”.

Los sociólogos también dirigen nuestra atención sobre un grupo numeroso, aunque se esté reduciendo: “aquellos que consideran que no debieron emprenderse las reformas” en el 2005 representaban el 21% de los encuestados, mientras que ahora se decantaron por esa postura el 8%. Pero los autores del estudio matizan: “La reducción de esta variante de protesta se ve compensada por el crecimiento de aproximadamente el mismo número de encuestados que no saben o no contestan (del 11% al 21%)”. Ese cambio en la opinión pública los investigadores lo explican por el sustancial aumento de la proporción de encuestados, que simplemente desconocen qué había antes de las “reformas” y cómo estas se llevaron a cabo: Por ello es especialmente relevante la siguiente conclusión de los autores del informe: “El porcentaje de rusos, que consideran que las reformas se realizaron de modo correcto, sigue siendo excepcionalmente pequeño (6%)”.

¿Pudiera ser que estas valoraciones negativas de estos 20 años de reformas sean consecuencia de la actual crisis económica? Los sociólogos del instituto de sociología de la ACR afirman lo contrario: “Si analizamos el modo en que los rusos valoran la situación que atraviesa hoy el país, y lo comparamos con la fase más aguda de la crisis económica global, la imagen que obtenemos es la estar volviendo gradualmente a la norma”. Como prueba se nos muestra la gráfica 1 (en la que, al igual que en el resto de gráficas” la suma es inferior al 100%, al no ser contabilizadas las respuestas del apartado NS/NC).

Por lo demás, si analizamos los datos del estudio desde el punto de vista de la relación de la población de Rusia hacia el modo de vida capitalista, lo que reflejan es el rechazo a este, por la inmensa mayoría de los habitantes de Rusia. La situación la consideran normal, y en consecuencia, el modo de vida satisfactorio, solo uno de cada cuatro de los encuestados en 2011, cuando se intenta inculcar a la fuerza en la conciencia social la idea de que la crisis ya está superada: al mismo tiempo ¾ partes de los encuestados califican la situación en Rusia como problemática, de crisis, o catastrófica. Difícilmente estos resultados se puedan considerar de respaldo al sistema social, que se basa en la omnipotencia de la propiedad privada.

Creo que para aclarar la relación de los rusos hacia el capitalismo, se podrían introducir ligeras variaciones en la metodología, utilizada por los sociólogos: agrupar las valoraciones “problemática, de crisis, o catastrófica”. No es una diferencia cualitativa: a fin de cuentas, no parece que sea relevante, el que una parte de los encuestados califique la realidad capitalista como de “crisis”, y otra como “catástrofe”. Lo que estamos estudiando, de momento, es si rechazan nuestros compatriotas el sistema capitalista, y no el saber si los rusos han sido llevados hasta “un sentimiento que refleja un estado de agresión interior” en el cual los encuestados mostraban deseos de “matar a tiros a todos los corruptos y especuladores, por culpa de los cuales, la vida en el país es como es” (en el informe “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”, esa respuesta también está contemplada).

El agrupar esas dos valoraciones (de crisis y catastrófica) permite de un modo más exacto comprender la percepción del sistema capitalista a lo largo de toda la etapa de “reformas”. Para eso podemos utilizar los datos de la investigación “de series temporales largas”, en las que los sociólogos, mueran la valoración que hace la población de Rusia de la situación que ha atravesado el país entre 1994 y 2011.

De esa tabla se deduce, que en todo ese tiempo de “construcción capitalista” no ha habido ningún año, en que la mayoría de nuestros compatriotas valorase como “normal” el modo de vida capitalista. Incluso en el momento álgido de los “felices años 2000”, por cada cuatro encuestados que valoraban la situación como normal, había cinco, que respondían que relacionaban el orden burgués con “crisis o catástrofe”. En todo el periodo estudiado, solo hubo dos años, en que los disconformes con la situación fuesen menos de 2/3 partes de los rusos. Cada dos años, cuando se efectuaban mediciones sociológicas, más del 80% de los ciudadanos de la Federación de Rusia manifestaban su insatisfacción por la situación en la vida económica y social. Por tanto tenemos pleno fundamento para asegurar que la mayoría de nuestros compatriotas rechaza, de un modo estable, el capitalismo.


“Piensa primero en tu país”

Al abordar el estado social y psicológico de la sociedad rusa, los investigadores del IS de la ACR, centran su atención en la polarización de la sociedad. Sobre su base, -se señala en el estudio- se asienta el nivel de vida de los distintos grupos sociales: “La diferencia en las condiciones de bienestar material genera en la sociedad rusa contemporánea, no solo diferencias en el acceso a diversos bienes materiales, sino también, en cierto modo, un sentimiento de pertenencia a dos mundos diferentes: uno, en el que puedes sentirte seguro de ti mismo, puedes controlar tu vida y contar con el apoyo de los que te rodean, y otro, de exclusión social, caracterizado por una existencia dependiente, de alienación, sin un soporte social, sin poder sentirse seguro de uno mismo, y sin ningún tipo de esperaza en el futuro".

No cabe duda, de que cada uno de estos polos, que siguen distanciándose, se forma su propio sistema de valores. Aquello, que tradicionalmente se asocia con los valores positivos, que están presentes en la mayoría de los rusos. Entre esos valores, los sociólogos señalan el sentimiento de solidaridad. A esa mayoría que valora la solidaridad, se contrapone una minoría de la sociedad, que está compuesta mayoritariamente por personas, que en su mayoría pertenecen a ese 20% de la población más acomodada. Recordemos, que según datos del Instituto de Sociología, en sus manos se concentra más del 48% del efectivo de la masa monetaria del país. El modo de vida burgués de esta parte de la sociedad ha conducido a que no solo se haya convertido en la principal protagonista de las relaciones de competencia, sino también en su víctima. El individualismo se ha convertido en norma de conducta de los representantes de ese 20% de la sociedad. Esa es la polarización que han consignado los autores del estudio “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”.

La encuesta ha venido a reflejar en la práctica esa oposición entre colectivismo e individualismo. Esta dinámica que han establecido los sociólogos, viene una vez más a demostrar que la mayoría de los rusos rechazan los valores básicos burgueses. Por lo demás, los autores del estudio “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”, no son partidarios de concluir que la mayoría de nuestros compatriotas rechace los fundamentos capitalistas del modo de vida. Para eso son investigadores de buena fe. Por eso especial relevancia adquiere una de las conclusiones clave del estudio: “Las valoraciones que hacen los rusos de la situación en el país están relacionadas en primer lugar no con su propia situación personal, sino con el hecho de cómo perciben la dinámica de la situación económica en el país, el retraso de Rusia con respecto a los países más desarrollados, las perspectivas de desarrollo del país en los próximos años (remarcado por los autores del estudio. Nota del autor)”.

Esto es un testimonio muy importante. Viene a confirmar, que en estos 20 años de reformas, en los que el régimen burgués se ha esforzado a fondo por inculcar el individualismo, no ha podido resolver esta tarea estratégica. Cuando se habla de la situación en el país, los rusos la valoran ante todo, a través del prisma de los intereses sociales. Los intereses personales, por regla general, continúan siendo considerados como algo secundario. Por lo que se ve, no termina de agarrar la concepción burguesa del mundo en el alma de nuestros compatriotas.

Como corroboración de esta conclusión aparece el análisis sociológico del sentimiento de injusticia del propio sistema capitalista en Rusia: los autores del estudio encasillan ese sentimiento entre los “negativos”. Pero al mismo tiempo señalan, que ese “sentimiento” (“de injusticia por todo lo que ocurre alrededor”. –V.T.) que refleja la falta de legitimidad a ojos de los rusos del propio orden que se ha establecido en Rusia, lo han experimentado en abril de 2011, cuando menos la mayoría absoluta de todos los rusos (mas del 90%), de los que el 46% lo experimentan a menudo (remarcado por los autores del estudio.-V.T.). Teniendo en cuenta el papel de la justicia/injusticia en la cultura rusa, en la que juega las veces de “carcasa” de la autoconciencia nacional, esto es una “llamada de atención” muy importante, que habla bien a las claras de la insatisfacción en este terreno. De un modo más amplio, ese sentimiento de de injusticia por todo lo que acontece alrededor, está presente entre los representantes del grupo social de mayores de 50 y especialmente de 60 años. (55% y 66% respectivamente), entre la población pobre y de menores ingresos (55% entre aquellos con unos ingresos inferiores a la mitad de los ingresos medios, y un 51% en aquellos con unos ingresos que en general no superan la media, es decir de unos 9000 rublos)… Lo más interesante sin embargo, no es tanto la localización, como la dinámica del sentimiento de injusticia por lo que ocurre a su alrededor en los últimos años”.

Salta a la vista que esa sensación de injusticia por lo que ocurre alrededor tiene una dinámica, que es bastante cercana a la dinámica del sentimiento de solidaridad. La fuerte relación entre estos sentimientos cívicos es excepcionalmente importante, precisamente por el hecho –como señalan los autores del estudio- de que nuestros compatriotas valoran los fenómenos sociales y sus procesos, no tanto por el prisma de lo individual, como del interés colectivo.

En cuanto a la dinámica del sentimiento de injusticia, los autores del estudio, señalan que el comienzo de la década del 2000 se significó por un fuerte descenso de aquellos, que experimentaban a menudo ese sentimiento de desigualdad. Sin embargo los últimos años de nuevo arrojan un crecimiento, y bastante notable, de la difusión de ese sentimiento”. Señalan que ese sentimiento de injusticia ante lo que sucede alrededor, no solo destaca notablemente por su relativa gran difusión, sino también por esa pequeña pero constante proporción de aquellos, que no lo han experimentado nunca (en todo el periodo de observación, ese indicador nunca ha pasado del 10%). Significativa es la conclusión a la que llegan los investigadores del Instituto de Sociología: “Esto demuestra no solo el que a ojos de los rusos el sistema de relaciones sociales que se ha formado en Rusia sea ilegítimo, también demuestra la deslegitimación del gobierno a ojos de una parte significativa de nuestros compatriotas, que se está produciendo en los últimos años (remarcado por los autores del estudio.-V.T.)”.

A los sociólogos les alarma la amplia distribución del “sentimiento de vergüenza por el estado actual del país (remarcado por los autores del estudio.-V.T.). La vergüenza por la situación del país, en unas condiciones de relativa estabilidad y fortaleza en el plano internacional y de una en general exitosa y estable fase a su paso por el punto álgido de la crisis económica global de los últimos años, está ligada con la negación del “orden de las cosas” que se ha establecido en Rusia, de las “normas del juego” etc., que resultan para la gente, no solo injustas, sino vergonzosas.

La legitimidad de esa interpretación viene corroborada por el hecho, de que ese sentimiento de vergüenza por el país está íntimamente relacionado con el sentimiento de injusticia por todo lo que sucede alrededor, y con que no se puede seguir viviendo así. En la práctica estos tres sentimientos conforman internamente un componente unido del modo de pensar de un grupo significativo de rusos. Solo un 3% no experimentan nunca ninguno de los tres sentimientos mencionados.”

Es difícil no estar de acuerdo con esta interpretación de los datos sociológicos concretos, incluso si su entonación tiene un cierto carácter de reserva. Lo principal aquí es que se señala de un modo exacto la interrelación e interdependencia de los sentimientos que no son compatibles con la actitud burguesa ante la vida.

Los autores del estudio hacen hincapié en la descripción objetiva de los encuestados, que presentan con mayor frecuencia ese sentimiento: “El papel más importante entre ellos lo juega la edad: el 46% de los que lo experimentan a menudo, son gente de más de 50 años, además este grupo de edad representa más de la mitad (52%), y entre aquellos, que presentan de un modo constante los tres componentes de ese bloque unido de sentimientos negativos, al mismo tiempo. Sin embargo, entre la juventud ese sentimiento de vergüenza por el país y todo ese bloque de sensaciones en el que se incluye, están presente de un modo amplio. Baste decir, que el sentimiento de vergüenza por su país lo experimenta de un modo firme, uno de cada cuatro rusos, menor de 25 años y que solo un 30% en este grupo de edad, no lo experimenta prácticamente nunca (con un 27% que no experimenta nunca ninguno de esos tres sentimientos negativos mencionados)”.

El conocer la estructura de edad de aquellos que sienten vergüenza por el estado actual de Rusia, por supuesto tiene gran interés: Pero aún sería más enriquecedor conocer, cómo se distribuyen esos sentimientos de vergüenza por la situación del país y de injusticia en los diferentes grupos de profesiones y situación financiera. Esa información (de la que sin duda disponen los autores del informe), sin duda enriquecería la imagen de las principales clases de la sociedad rusa en la actualidad.


No se puede seguir viviendo así

El mérito notable del estudio “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos”, consiste en que en su campo de visión, han estado no solo los procesos y fenómenos que ya habían sido antes objeto de la atención social. Los investigadores intentan llegar a ver cómo hace su trabajo “el topo de la historia”. Quizá lo importante aquí no sean tanto los indicadores cuantitativos, como las tendencias.

En esa serie de procesos habría que encasillar la difusión del sentimiento de que ya no se pude seguir viviendo así. Está claro, que ni de lejos, todo el que haya respondido afirmativamente a esa pregunta, está dispuesto a tomar parte activa y decidida en los actos de protesta. Aquí, lo más importante es constatar esa tendencia. Es precisamente la que demuestra la posibilidad de transformar las ideas en fuerza material, es decir el proceso de crecimiento de los sentimientos y las ideas, hasta convertirse en acciones prácticas. En el análisis que ofrece el estudio del Instituto de Sociología de la ACR, se muestra la dinámica de la propagación de ese sentimiento de que “no se puede seguir viviendo así”.

Los sociólogos reparan en que ese sentimiento de que no se puede seguir viviendo así, aparece fuertemente ligado con el sentimiento de vergüenza por la actual situación del país.: En ese sentido, en el informe se señala que: “si antes estos eran principalmente grupos de población de bajos ingresos, ahora se ha visto aumentada la representación de ese grupo por capas de población acomodada, y la relevancia estadística de la relación del sentimiento de que no se puede seguir viviendo así, con los ingresos o la edad, es simplemente incomparable con el papel de las particularidades del modo de entender la vida de los encuestados, y más concretamente con la presencia en ellos de una constante sensación de injusticia y de vergüenza por lo que ocurre en el país. Como resultado, incluso en el grupo de menores de 30 años, uno de cada cinco siente que no se puede seguir viviendo así”. Los portadores de ese sentimiento, en opinión de los sociólogos, se distribuyen uniformemente en todos los tipo de núcleos poblacionales. Por ejemplo, en las megalópolis, su porcentaje representa un cuarto de la población.

Pienso que precisamente con ese sentimiento aparece ligado otro (“negativo”, como lo definen los autores del estudio) sentimiento: “el deseo de pasar por las armas a todos los corruptos y especuladores, por culpa de los cuales, la vida en el país, es la que es”. Hay que pensar, que los sociólogos no pretendían aquí sacar a la luz a los extremistas, sino determinar el grado de decisión a realizar con hechos (que no tienen por que ser ni extremistas, ni radicales, en la mayoría de los casos) ese convencimiento de que no se puede seguir viviendo así. Lo que obtenemos es el siguiente cuadro: a menudo experimentaban “el deseo de pasar por las armas a todos los corruptos y especuladores, por culpa de los cuales, la vida en el país es la que es”, el 34% de los encuestados, y un 38%, en ocasiones. Nunca han experimentado ese sentimiento un 28% de los encuestados.

Hay que decir, que los indicadores cuantitativos de las respuestas a esa pregunta, no conviene en general tomarlos en consideración: no se puede creer en que a una persona, que no haya tenido esa amarga sensación de que no se puede seguir viviendo así, de repente le surja “el deseo de pasar por las armas a todos los corruptos y especuladores, por culpa de los cuales, la vida en el país, es la que es”. Pero según los datos del estudio, son un 29% los que a menudo tienen el sentimiento de que “no se puede seguir viviendo así”. El deseo de “pasar por las armas a todos los corruptos y especuladores (la alianza del capital con la burocracia, que se encuentra en el gobierno) aparece en el 34% de los encuestados. Además conviene tener en cuenta (y los autores del estudio aluden a eso) que en los últimos tiempos la fórmula “de que no se puede seguir viviendo así”, recoge adhesiones, no solo de los detractores del sistema capitalista, también de sus partidarios, basta con recordar a los activistas del no registrado “Partido de la Voluntad Popular”.

La significación de estos datos sociológicos hay que buscarlos en otro sitio. Atestiguan en un caso, la incapacidad de esa alianza entre capital y burocracia para gobernar de modo que puedan garantizar la consolidación de toda la clase gobernante, y por otro lado, no solo evidencian el rechazo al capitalismo por parte de la sociedad rusa, sino también la disposición, que va cobrando fuerza, de convertir ese rechazo a la explotación del hombre por el hombre, en fuerza material.

El estudio sociológico “Veinte años de reformas, a ojos de los rusos” ofrece un enriquecedor material para la reflexión. Especialmente útil para los comunistas. Sería una lástima, imperdonable, el que se convirtiese únicamente en objeto de estudio obligatorio para las tesinas de estudiantes del doctorado y los “roedores” de crítica.

Fuente: http://gazeta-pravda.ru/content/view/8355/34/

Chávez: Alianza con el PCV es una necesidad histórica y tenemos que seguir construyéndola


Recogido de AVN


El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, expresó a los dirigentes del Partido Comunista de Venezuela (PCV) que la alianza que mantiene el Gobierno Nacional con esta organización va más allá del tema coyuntural, debido a que ha sido una necesidad histórica que tiene que seguir construyéndose para el beneficio de toda la patria.



El Jefe de Estado se comunicó vía telefónica con los participantes del XIV Congreso Nacional del PCV realizado este jueves en la Sala Plenaria de Parque Central, en Caracas.

“Nuestra alianza es mucho más que coyuntural, es una necesidad histórica y tenemos que seguir construyéndola”, expresó Chávez quien fue aplaudido por todos los presentes en el Congreso del PCV.

Al evento, que culmina el domingo 7 de agosto, asisten 526 delegados nacionales y 43 representantes de 31 organizaciones provenientes de 28 países de los cinco continentes.

Chávez recordó que gracias al apoyo que siempre ha dado el PCV a los movimientos revolucionarios y defensores de los derechos del pueblo, hoy día el país puede vivir en Revolución.

Por ello, agradeció el apoyo que el Partido Comunista le ha dado como Presidente e incluso desde que se integraron a la lucha revolucionaria que estalló el 4 de febrero de 1992.

“Gracias por el apoyo de siempre y ustedes saben que siempre estaré apoyando al PCV, por su vida y trayectoria revolucionaria venezolana”.

El mandatario nacional recordó a líderes revolucionarios como Pío Tamayo y Guillermo García Ponce.

Asimismo, resaltó la conciencia que ha tenido el PCV en las reivindicaciones del proletariado para alcanzar la justicia social, pues a lo largo de la historia demostraron su compromiso con el pueblo a través de la unidad e incluso con el apoyo activo a los militares patriotas que formaron parte del inicio de la Revolución Bolivariana.

También felicitó a los militantes del PCV por la realización del Congreso al verlos muy motivados en el análisis de sus líneas estratégicas políticas e ideológicas.

De igual forma, saludó a los invitados internacionales que forman parte de los partidos comunistas de otros países del mundo y les dio la bienvenida a la patria bolivariana.

Chávez invitó al PCV a construir junto al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y demás organizaciones progresistas del país, a levantar y consolidar el Gran Polo Patriótico, que permitirá engranar todas las fuerzas revolucionarias en beneficio del desarrollo pleno del país.


Prohibición de símbolos comunistas en Polonia y Eslovaquia: es ilegal y anticonstitucional


Enviado por Beata Karon, del CC del Partido Comunista de Polonia


Resolución del Partido Comunista de Polonia (KPP)

El 19 de julio, el Tribunal Constitucional ha emitido una sentencia declarando que la prohibición de los símbolos comunistas en Polonia viola la constitución.

El Tribunal ha declarado que la aplicación del artículo 256 del Código Penal, que se estaba llevando a cabo desde el 8 de junio de 2010, viola el principio de la libertad de expresión, de la adquisición y difusión de información que es garantizada por la Constitución. En su declaración los jueces del Tribunal, escribieron que el punto 2 de la ley (Quien venda productos, registre, importe, posea, regale, transporte o envíe el contenido de impresión, registro u otro elemento que contenga lo que se describe en el punto 1, o lleve un símbolo totalitario fascista, comunista o de otro tipo, se somete a la misma pena.) estaba claro y por ello podría representar una amenaza a la libertad de expresión. También señalaron que "los símbolos totalitarios" que se menciona en la nueva ley no se han definido.


El Tribunal también ha recordado que Polonia ha firmado el Convenio Europeo de Derechos Humanos y por lo tanto, debe aceptar sus principios. La decisión del Tribunal Constitucional fue el resultado de una apelación presentada por varios diputados.


Este veredicto es definitivo.


Esto confirma que nuestros argumentos y la campaña contra esta prohibición eran fundadas. Sin embargo, es sólo un paso en la lucha contra el anticomunismo. Nuestra campaña contra la discriminación de los comunistas debe continuar a nivel nacional e internacional, por el problema de las represalias que están teniendo lugar en muchos países, particularmente en Europa del Este. La demanda contra Algirdas Paleckis en Lituania y la nueva ley que criminaliza el cuestionamiento de los "crímenes comunistas" en Eslovaquia es la evidencia más reciente de esta tendencia.

En conclusión, nos gustaría dar las gracias por todas las acciones de solidaridad que se organizaron en todo el mundo y el apoyo de diversas organizaciones progresistas.
Especialmente nos gustaría agradecer a todos los camaradas que visitaron Varsovia el 8 de junio de 2010, cuando dicha prohibición se introdujo, para participar en una conferencia de prensa y en la movilización.



Enviado por la FMJD, Federación Mundial de la Juventud Democrática


Nuevo paso anticomunista en Europa: ahora Eslovaquia


La Federación Mundial de la Juventud Democrática (FMJD) denuncia que se está llevando a cabo una nueva escalada en el ataque contra fuerzas comunistas, esta vez en Eslovaquia. El gobierno de este país ha aprobado una enmienda a las leyes existentes que incluyen la siguiente oración:"
Aquel que públicamente niegue, cuestione, se exprese de acuerdo o trate de excusar (...) los crímenes del régimen basado en la ideología comunista (...) será castigado con prisión de entre seis meses y tres años."

Esta decisión y la nueva ley que se ha cerado son un nuevo paso en el ataque generalizado contra los Partidos Comunistas y las organizaciones juveniles que se han dado en todo el mundo, pero particularmente en Europa.

Conscientes de que el actual sistema es incapaz de otorgar al pueblo eslovaco del "bienestar, la justicia y la democracia" que les fueron prometidos durante el principio de la década de 1990, las clases dominantes necesitan perseguir y eliminar todas las fuerzas que, de manera organizada, luchan contra la destrucción de los derechos sociales, políticos y democráticos que la restauración capitalista ha intentado eliminar.

Pero todavía, la idea de "crímenes comunistas" es parte de una línea ideológica más amplia que trata de equiparar al fascismo y al comunismo (los dos "regímenes dictatoriales" que son "igual de dañinos") y, de esta manera, no solamente limpiar la cara de los criminales fascistas ("no eran tan dañinos") sino también, y particularmente, atrapar a los pueblos y a la juventud en el pensamiento de que no existe ninguna alternativa al actual orden internacional y sus injusticias y desigualdades.

Este intento de reescribir la Historia es, después de todo, más claro en un país que, como Eslovaquia (
en otros tiempos parte de Checoslovaquia), estuvo bajo el yugo de la dominación de las fuerzas nazis, que contó con el gran apoyo del Ejército Rojo para liberarse de la oscura noche de la dominación fascista.

En esta ocasión, expresamos nuestra solidaridad con todas las formaciones democráticas de Eslovaquia, particularmente con nuestros camaradas de la Juventud Socialista de Eslovaquia (SZM), y les animamos a que continuen su lucha por un país verdaderamente democrático y justo, donde el pueblo y la juventud sean capaces de tener en sus manos el destino de su propio futuro.



12 de agosto de 2011

¿Qué pasó realmente en la frontera coreana?

Enviado por la Asociación de Amistad con Corea en el Estado Español


Tras inventar de nuevo el complot de la "provocación" cometida supuestamente por el Ejército Popular de Corea en el mar cercano a la isla Yonphyong disparando los cañones, los belicistas del círculo militar surcoreano libran ahora una feroz campaña anti-República Popular Democrática de Corea movilizando los principales medios de prensa como KBS, MBC y Yonhap TV.

En relación con ese tema, el jefe de la delegación de la parte Norte de las conversaciones de trabajo militar Norte-Sur de Corea dio el día 10 la siguiente respuesta a la ACNC:

En estos días, se libra en todas partes de la República Popular Democrática de Corea la marcha general para construir un Estado próspero.

También en la provincia de Hwanghae del Sur, cercana a las 5 islas del Mar Oeste, se impulsa en etapa crucial un gran proyecto de construcción para el mejoramiento de los niveles de la vida del pueblo.

En el curso de esta obra, se llevó a cabo el día 10 un dinamitazo de trabajo rutinario.

Pero, asustados por esa explosión, los belicistas del círculo militar títere del Sur de Corea tergiversan la situación como si el EPC hubiera cometido la "provocación" de fuego artillero y pretextándola, procedieron a la bochornosa acción de respuesta militar.

Es absurdo que en la actual era de ciencias en que funcionan sofisticados medios de detección e inteligencia, ellos hayan dado la voladura de trabajo por el cañonazo y localizado el punto de impacto de proyectiles, que ni siquiera fueron tirados, como en las aguas marítimas periféricas de la "línea de límite al Norte".

Además, resulta tragicómico que ellos hayan respondido con cañonazos sin averiguar siquiera la verdad de lo ocurrido esta vez en el Mar Oeste de Corea, zona muy delicada donde frecuentan choques entre ambas partes coreanas.

Para convertir ese incidente en la "provocación" del EPC, el círculo militar surcoreano habla con bombo y platillo de su inmediato "ataque de respuesta" mintiendo que se escuchó en el contorno de la isla Yonphyong del Mar Oeste la detonación de tres proyectiles y uno de éstos ha sobrepasado la "línea de límite al Norte".

Para dar credibilidad a su complot, los belicistas surcoreanos enviaron urgentemente los buques de combate de refuerzo al contorno de 5 islas del Mar Oeste, movilizaron los aviones de combate y decretaron el estado de alerta conjunta a las unidades en el frente.

Al mismo tiempo, hicieron regresar todos los barcos pesqueros del Sur de Corea y evacuaron a los habitantes al refugio.

El EPC no puede pasar por alto ese complot barato anti-RPDC que orquestaron otra vez a plena luz del día los belicistas militares surcoreanos falsificando como cañonazo la voladura normal de trabajo que se hace en el curso de construcción pacífica.

Este complot militar tiene su génesis en el vicio crónico de los conspiradores que insatisfechos con la invención del incidente de hundimiento de la corbeta "Cheonan", el peor caso de la historia nacional utilizado para iniciar su campaña en busca de enfrentamiento fratricida en general, degradaron la situación de la Península Coreana a la coyuntura de guerra, en que se intercambia el fuego, al provocar el incidente de fuego artillero en la isla Yonphyong.

Igualmente, parte del siniestro intento de los belicistas del círculo militar surcoreano de romper el clima de diálogo, que se da últimamente en la Península Coreana y su contorno, y de llevar las relaciones íntercoreanas a la fase de infarto caracterizada por los enfrentamientos y choques.

Lo más grave del caso es el malsano propósito de ellos de volver a poner tirante la situación de la Península Coreana al desplegar a toda costa los ejercicios militares conjuntos "Ulji Freedom Guardian" de este año, pese al mensaje abierto de la RPDC enviado a nombre de la Representación del Ejército Popular de Corea en Phanmunjom, en que ella exigió a EE.UU. y las autoridades surcoreanas la suspensión de esa maniobra.

Específicamente, en el ámbito interno, fomentan la atmósfera conflictiva con la RPDC inventando el "incidente del grupo de espías", el "de violación de la ley de seguridad", el "de atentados de asesinato", etc. y por parte externa, pretenden procurar la justificación de los mencionados ejercicios militares EE.UU.-Sur de Corea fabricando el incidente de cañonazos.

De esta manera, quieren buscar el pretexto de la guerra de agresión a la RPDC.

Los que cayeron en crisis están habituados a incurrir en los complots y falsificaciones.

A través del presente caso, quedó evidenciado una vez más que las autoridades surcoreanas, en particular, los belicistas militares son grandes maestros en tejer complots e inventar, capaces de cualquier cosa para enfrentarse con la connacional RPDC.

Los criminales serán condenados severamente por todos los coreanos.

El ejército y el pueblo de la RPDC seguirán marchando adelante hacia el mejoramiento de las relaciones íntercoreanas, la paz y la reunificación de la nación frustrando con audacia los complots de toda índole de los elementos conflictivos anti-RPDC.

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Rodong Sinmun, diario de mayor tirada de Corea del Norte, dijo:

Hace poco, una personalidad de alto rango del círculo militar del Sur de Corea se reunió a puerta cerrada con el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Terrestres Norteamericanas que visitó en secreto el Sur de Corea, ocasión en la cual los dos confabularon sobre las "estrictas medidas para hacer frente" a la "inclinación militar y la posibilidad de provocación" de alguien y al "fortalecimiento de la combatividad asimétrica inclusive las armas nucleares, misiles y ciber".

Por otra parte, fue revelado por la recién información de prensa el hecho de que las autoridades surcoreanas y el círculo militar norteamericano elaboran en secreto el documento anexo del "CONPLAN 5029" para hacer frente al "estado de emergencia del Norte".

Esto demuestra que ellos persiguen la confrontación militar y la provocación de guerra de agresión a la RPDC.

Así señala el diario Rodong Sinmun en un comentario individual difundido este martes y continúa:

Dichas conversaciones secretas son una prueba clara de que los belicistas norteamericanos y surcoreanos libran detrás de la cortina del diálogo la peligrosa conspiración tendente a atacar la RPDC e impedir la corriente del diálogo bajo el pretexto de la llamada "amenaza de la RPDC".

Lo cuestionable es que a pesar de la fuerte protesta de la opinión pública interna y externa las autoridades surcoreanas no abandonaron su agresivo "CONPLAN 5029" sino elaboran en secreto hasta el documento anexo junto con EE.UU. Es así la acción práctica de las autoridades norteamericanas y surcoreanas que hablan tanto del diálogo.

Ahora, la opinión pública interna y externa desea promoverse más el ambiente de diálogo creado difícilmente en la Península Coreana.

Pero, si las autoridades surcoreanas persiguen enfrentarse militarmente con la RPDC junto con las fuerzas extranjeras como ahora, puede desaparecer el ambiente de diálogo y traer la consecuencia catastrófica.

La realidad prueba claramente que las autoridades surcoreanas intentan impedir la corriente de la situación hacia el diálogo y la paz y realizar su peligroso intento anti-RPDC junto con las fuerzas extranjeras.